Participantes


La lista de usuarios que participan de la quiniela esta semana

Participante Cantidad
David Navas 3 euros
Kiko Gambas 3 euros
Rodrigo 3 euros
Guille 3 euros
Alf 3 euros
Charly 3 euros
Elena 3 euros
Quique 3 euros
Morilla 3 euros
David M 3 euros
Cascoporro 3 euros
Andrés 3 euros
Juanita 3 euros
Kalquetinrre 3 euros
Valverde 3 euros
Tartesos 4,5 euros
Vincent 4,5 euros
Dogma 4,5 euros
Belge 7,5 euros
Fernando 6 euros
Lechu 6 euros
Alfonso 30 euros
Club InLucro 108 euros

La historia de una foto mítica


La historia de una de las fotos más icónicas del ciclismo abulense versa sobre el paso del tiempo. Lo cantaba Leo Ferré con esa voz irrepetible que Dios le dió. Todas las grandes historias son tristes con el tiempo. chaba

Las ciclomarchas fueron un gran invento. Hasta que la codicia acabó con él. Si me tengo que quedar con una, la mejor de todas fue La Ciclomarcha de Los Lagos de Covadonga. La recuperó un grupo de aficionados asturianos en 2003. La que se organiza en la actualidad, desde hace 4 años, no tiene nada que ver con la iniciativa “original”. Es lo de siempre: un grupo de listos hizo caja, la vendió. Los voluntarios se quedan en esos casos con un palmo de narices. Han intentado mantener el recorrido – es muy bonito – con otro puerto intercalado, pero se ha perdido el espíritu. Llegábamos a Cangas, casi en fiestas ya, y el pueblo estaba contento. La última vez que fui, en 2019, estaba “apagado”, desconectado. Y eso que gracias a la pasta gansa, donde la administración veía problemas con 2000 participantes, ya no lo había con 5000.

La ciclomarcha de Los Lagos de Covadonda era casi perfecta, en todos los sentidos: voluntarios bien coordinados, organización discreta, un entorno envidiable, un pueblo acogedor , capacidad hotelera, coherencia del recorrido, dureza y belleza, buen rollo y gran ambiente entre los participantes. Lo dicho: la ciclomarcha ideal. Un tramo rápido y un par de puertos espectaculares: la Tornería, para entrar en materia, precioso, y la subida a los Lagos, más que dura. Dicho esto, la dureza de una subida no es su porcentaje de desnivel, es la velocidad con la que llegas a pie de puerto. Si has pasado la basílica en 3 horas, sabes que vas a sufrir una hora para llegar a meta.

La primera vez que participé, fuí como una moto hasta la Huesera, pero a punto de empezar el Mirador, reventé por falta de agua. Cometí el error de no parar en el avituallamiento. Tuve suerte: una pareja me dio su litrona de agua y un poco de conversación. Aún así, arriba llegué con más pena que gloria. Con la lección aprendida, al año siguiente paré en el avituallamiento, estuve un rato allí, y tardé 4 horas justas. No disfruté tanto pero llegué entero arriba. Y, dos meses más tarde, en la Perico, más de lo mismo: parar en los avituallamientos, aunque vayas como una moto, te obliga a recordar que has ido a disfrutar, a intercambiar buenos momentos con los demás, a rodar, a subir y bajar puertos, a expresar tu mejor ciclismo. Paré, me reí, bajé bastante despacio los puertos, y en los últimos 40 km, volé literalmente. El que guarda tiene, decía Arroyo, y es cierto. Navafría y esos 40 últimos km a fuego fueron una experiencia irrepetible. Llegué como unas castañuelas.
A lo que iba, antes de irme por las ramas: un conocido, que fue muy buen ciclista en categorías inferiores y se malogró por indisciplina, me decía, socarrón: “Belga, ¿Y por qué no compites? Le expliqué que nunca he querido competir. Para mi la bici, era un medio de transporte y pura diversión. De pequeño, no me perdía una carrera en la tele, con los grandes monstruos de leyenda…y por supuesto, yo era de Luis Ocaña. Desde los 7 años, tenía una pequeña bici de carrera, Seguí yendo al colegio y montando en bici hasta los 16 años. Recorrí Bruselas entera mil veces, de una punta a otra, pero no me atraía la idea de competir.

Volví a montar en bici en España, a los 27, por culpa de mi tío, el catalán, que competía en MTB por aquel entonces. Se gastaba medio millón en cada bici que se traía, pesetas de las de entonces, y se enfadó mucho conmigo cuando aparecí por allí con una bici que me dieron al comprar la batería del coche en un taller de Arévalo. Me costó 20.000 pesetas y pesaba exactamente 20 kilos. La sigo teniendo en el huerto, de recuerdo.Se enfadó tanto, el pollo, que cuando se fue, me prometí que le mojaría la oreja con ese mismo hierro.
Como soy bastante cabezón, y me gusta la bici, fui cogiendo la forma casi sin darme cuenta. De aquellos años y de aquella bici, recuerdo las vaciladas de Jose (Chaba) y David Navas. El caso es que cuando vino Miguel, al año siguiente, tuvimos que medio posponer el que iba a ser el Gran Desafío a Muerte en Ok Corral. Se había pegado un galletón de campeonato, compitiendo en Cataluña, el pobre. El caso es que estaba mermado, y siempre tenía excusas. Aquello definió lo que iba a ser un Reto por Entrega, nunca definitivo. Inventábamos recorridos y nos retábamos con grandes insultos. Las apuestas eran siempre cuantiosas pero no recuerdo que pagásemos ninguna.

El caso es que de esa forma un poco extraña, iba buscando recorridos (lo que hoy llaman segmentos en Strava) y superando marcas, con camiseta volandera, sin agua, sin guantes ni pedales automáticos, acumulando miles de anécdotas divertidas. La más surrealista ocurrió en septiembre. El Reto era un recorrido medio largo, pero nos pilló una tormenta imposible de describir. Por algunos tramos, corrían 50 centímetros de agua, sin exagerar lo más mínimo. Llegó un momento en el que el granizo nos dejó congelados, y tras arrasar unas cuantas cepas se nos ocurrió meternos dentro de un contenedor de la basura que se había volado. Caían piedras del tamaño de los huevos de codorniz. Al día siguiente teníamos moratones hasta en el DNI. El Gran Duelo quedó pospuesto de nuevo, por causa de fuerza mayor.

El que iba a ser el último Gran Desafío a Muerte en OK Corral acabó como todos los demás. Las cosas del Destino. En esta ocasión, había calentado la pesada y la rueda de prensa antes de saltar al cuadrilátero. Aposté a la grande. Le iba a meter 20 minutos arriba, en el Puerto de Mijares, y si no, tendría que pagar una copiosa cena. El suflé fue cogiendo volumen y se apuntaron varios testigos. Y a última hora, alguien se lo comentó a Carlos Sastre, y el ganador del Tour se vino a hacer los 122 km con nosotros.
La cosa prometía pero estaba un poco asustado. Nunca habíamos tenido tanto público y mi tío estaba bastante en forma. La única estrategia era meterle diferencia en los 60 primeros km del recorrido e intentar rematar en Mijares. La clave era llegar escapado a la Atalaya de El Tiemblo para luego poder rodar con todo el desarrollo. A punto estuvimos de lograrlo, pero no había contado con Carlos Sastre. Llegó todo enfadado y el Gran Desafío acabó, una vez más, antes de empezar. Terminamos el recorrido todos juntos.
Los años no perdonan, y al final se rindió. Cambió la bici por la petanca, el muy jodido. Con bici de carretera, equipación, entreno…la diferencia de edad era ya insalvable. Tengo una foto suya, que le hice con los 5 magníficos de la Escuela de Víctor Sastre, en la ciclomarcha de Paco Mancebo, en Navaluenga. Había ganado en la categoría Máster 40 y yo ni siquiera había completado la primera vuelta con una bici prestada, harto de caerme. Hazme una foto. chaba

La Revolución Puritana (21): El origen del contagio en el mundo


Decidí finalizar Inmunidad de Rebaño con una primicia impactante sobre el origen del contagio de SARS COV 2 en España y en Europa. Ya era consciente entonces que ese capítulo era un punto y seguido, porque lejos de concluir el libro, una puerta abierta sobre el acantilado precipita una abrupta sensación de vértigo.

No se trata de intuir las cosas. Hay que verificar que los hechos se relacionan de un modo riguroso. Una correlación estadística, por asombrosa que resulte, no es una relación de causa a efecto. Que el 75% de los muertos de la Pandemia sean católicos era impactante y sigue siendo asombroso, pero no debe cegarnos. Los insignificantes detalles que pasamos por alto para cuadrar un modelo son siempre importantes. Formular la pregunta pertinente es más útil que acertar la respuesta correcta.

La correlación entre la vacuna de la gripe y el exceso de muertes en las residencias de ancianos de los países católicos es un dato que intriga a muchos. Ubicar y describir el escenario del crimen no satisface su curiosidad, además preguntan Quién, Cómo, Cuándo y Por qué. Es decir: no quieren conocer, quieren que sea noticia. Si no es noticia, el hecho deja de existir. La actualidad es un inventario de catástrofes en el que no cabe la complejidad. Pueden esconder la verdad a la vista sin que nadie la vea, como una valiosa porcelana en una bazar chino.

Las hemerotecas son esas tiendas desordenadas en las que entras sin saber que el mapa del tesoro parece un cuaderno de colorear. Este, por ejemplo, es el que dibujó el virus H1N1 de la Gripe Aviar en 2009:
H1N1

Este otro, el mapa de la presencia católica en el mundo
católicos

coincide bastante con el de la presencia comercial del principal proveedor de viales contra la Gripe

Sequirus

y con el mapamundi del censo oficial del contagio de coronavirus,del Instituto Johns Hopkins, a finales de febrero
map

Pero, ¿Y este otro? ¿A qué corresponde?
StravaUSA

Es el mapa que un genial australiano consiguió utilizando a su manera el Strava, la popular aplicación de geolocalización que usan todos los deportistas. Fue sonado en su día, ya que consiguió ubicar de forma precisa todas las bases secretas del Ejército Americano.

En marzo, cuando la Inteligencia americana dirigía su dedo acusador hacia China, el gobierno de Pekín apuntaba como posibles sospechosos del contagio a los delegados americanos de los Juegos Militares de Wuhan en octubre de 2019. De hecho, algunos deportistas españoles regresaron a España con el testimonio de fuertes gripes y conatos de neumonía. Lo mismo que les pasó a los participantes del Dakar en Arabia Saudí, una tierra desierta y despoblada.

El mapa secreto de la presencia militar norteamericana en el mundo nos ayuda a encajar algunas piezas sueltas del gran puzzle de la pandemia, como son la fuerte mortalidad en Suráfrica, Egipto y Arabia Saudi, pero sobre todo explica los saltos entre países y regiones en los inicios del contagio. ¿Qué podían tener en común Andalucía, Torrejón, Lombardía, Inglaterra, Bélgica, el Sur de Alemania, Egipto, Arabia Saudí, Iraq/Irán, Corea y Japón con la región de los Grandes Lagos en EEUU? ¿Bases aéreas?

Comprobemos correlaciones, como hemos venido haciendo desde el mes de febrero:

Bases militares de EEUU en el Mundo

País/Región Muertes por Covid Porcentaje Contagio inicial
Grandes Lagos 145.000 9% SI
Costa Oeste 25.000 1,55% SI
México 115.000 7,14% No
Colombia 40.000 2,48% No
Brasil 185.000 11,47% No
Chile 16.000 1% No
Inglaterra 65.000 4% SI
Bélgica 18.000 1,11% SI
Alemania 22.000 1,36% SI
España 140.000* 8,7% SI
Italia 65.000 4% SI
Turquía 16.000 1% NO
Iraq 13.000 0,8% NO
Egipto 7.000 0,43% SI
Arabia 6.000 0,37% SI
Suráfrica 24.000 1,49% SI
Pakistan 9.000 0,55% NO
India 145.000 9% NO
Corea del Sur 600 0,03% SI
Japón 2.500 0,15% SI
Filipinas 9.000 0,55% NO
Australia 1.000 0,06% NO
Total 1.065.000 66,24%  

*Dato calculado en base a las estadísticas del ISCIII

Tal vez debamos cambiar la premisa implícita de que todo ocurrió por accidente para ayudar a los lectores a entender estas correlaciones. En 2018, el Ejército Americano ya conocía los efectos de la vacuna de la gripe, como demuestran los resultados del estudio epidemiológico que encargó. El 36% de los soldados vacunados contrajo un coronavirus y el 51% un metapneumovirus muy agresivo (MPVh) que provoca graves infecciones respiratorias. La pregunta pertinente es: ¿conocían las autoridades sanitarias europeas estos efectos secundarios? El nuevo protocolo de vacunación combinada, con Prevenar 13 y Pneumax 23, apunta en esa dirección. En España, la vacuna CHIROMAS de Sequirus contra la gripe, que administran a los que cumplen 65 años, se combina primero con el vial de Pfizer y al año, con la vacuna neumocócica polisacárida 23 de Sanofi. ¿Por qué iban a hacer tal cosa?

(c) Belge

¿Cuál es la mejor dieta para adelgazar?


Desayunar como un príncipe, comer como un burgués, cenar como un mendigo. Traemos a colación este análisis publicado en El Mundo, que recuerda el refranero castellano, porque se puede extrapolar a muchas otras facetas de la existencia y del pensamiento económico y es fácil de comprobar de forma empírica. Se trata de cambiar la manera de enfocar los problemas.

“¿Qué instrumento de medida deberías tener siempre a mano cuando te propones perder peso? Si lo primero que se te ha venido a la cabeza es la báscula, te equivocas. Hablamos del reloj. Porque decidir a qué hora comes es más importante que andar pesando ingredientes y sumando calorías. Es más, basta cambiar la hora del desayuno y la cena para causar estragos en tus depósitos de grasa corporal.

Para demostrarlo, Jonathan Johnston y sus colegas de la Universidad de Surrey (Reino Unido) diseñaron un estudio piloto con nueve adultos con un peso estable y sin problemas médicos importantes. La única pauta dietética que les dieron fue retrasar su desayuno una hora y media, y adelantar la hora de cenar otros 90 minutos durante más de dos meses. Una medida que en la jerga se conoce como restricción de horarios de alimentación (TRF por sus siglas en inglés). Por lo demás, podían comer lo que quisieran.