¿Es ilegítima la Deuda Pública acumulada por España?


El concepto de Deuda Odiosa   que desglosa Wikipedia es más bien confuso.  Se mezclan churras políticas y morales con merinas financieras, con la intención bastante evidente de descentrar el foco del debate. ¿Es necesario cuestionar o denunciar la legitimidad del poder público que toma decisiones? No. ¿Es importante conocer el procedimiento mecánico por el que queda hipotecada la soberanía personal y colectiva de la ciudadanía? Si.  Lo que convierte en ilegítima una Deuda son sus consecuencias.

Unos pocos datos ayudan a entender el debate planteado.  Cuando se fijan en 1998 las paridades de la Unión Monetaria, y los mercados empiezan a descontar y anticipar sus efectos lógicos, España registra una Deuda Externa Neta equivalente al 30% del PIB,  86.196.100 millones de pesetas.  Todas las instituciones públicas y privadas deben 25,8 billones de pesetas, con una carga financiera por intereses de 1,2 billones de pesetas.  Cada español tiene que afrontar una “hipoteca” de 30.000 pesetas al año (160 dólares).

Por arte de magia, el mismo día de la conversión oficial de las pesetas débiles en euros fuertes, todas las deudas existentes pasan a convertirse en euros.  Así, empresa y ciudadanos que debían 10 millones de pesetas,  pasan a deber 60.000 euros.   La Deuda Externa neta de España se convierte en algo más de 210.000 millones de euros, inferior al 33% del PIB de ese ejercicio.

Mecánica del fraude

Lo importante es conocer el procedimiento mecánico por el que se pasa de una Deuda Externa Neta inferior a los 180.000 millones de dólares, en 2001, a otra de más de 1.700.000 de dólares en 2010. ¿Qué hemos comprado a crédito fuera de España por un valor cercano a los 2 billones de dólares?  En el periodo concreto que va de 2003 a 2009, España se endeuda fuera de sus fronteras por un valor anual superior al 10% de un PIB dopado por un Gasto Público desbocado.

El Mito de la Burbuja Inmobiliaria, alimentado y patrocinado por el lobby financiero, ha servido de coartada retórica para justificar unas magnitudes tan asombrosas como extraodinarias. ¿Qué se puede comprar cada año en el mundo con 200.000 millones de dólares? El volumen de los pisos promovidos, construidos y vendidos con financiación bancaria, entre 2001 y 2010, asciende a algo más de 300.000 millones de euros, con los datos del Banco de España en la mano.  Pero  ¿Y el resto? ¿Cómo justificamos que, ya en el año 2010, cada español tenía la obligación de afrontar una carga de intereses de 2800 dólares al año?

Banco Popular

En el Caso del Banco Popular, quebrado por el BCE y el FROB con nocturnidad y alevosía, estamos viendo como se está usando el “ladrillo” como chivo expiatorio retórico para no dar las correspondientes explicaciones contables que exigen los accionistas. ¿Qué deudas tenía la entidad que presidía Ángel Ron desde que defenestraron a Luis Valls, y como se contrajeron?

La cuestión de la legitimidad de la Deuda Externa de España tiene que ver con la naturaleza pública o privada de los créditos concedidos entre 2001 y 2010. ¿Fueron todos préstamos de de interés público o negocios opacos entre particulares?  Nos dicen que los bancos y las cajas se endeudaron fuera de España para prestar dinero a los españoles que se querían comprar un piso a precio de burbuja, pero las cifras oficiales les dejan por mentirosos.  El apetito por el ladrillo de la clase media española se sustentó en un incremento de los ingresos. Muchos españoles, con ahorros suficientes, cambiaron de casa para beneficiarse de los descuentos fiscales.  Buena prueba de ello es que han amortizado con cuenta gotas sus hipotecas entre 2007 y 2017.

No por cambiar de moneda, cambia una economía. A lo sumo puede ocurrir, como en España, que un gobierno desleal infle el gasto público de un modo artificioso para justificar transferencias opacas, pero será siempre con cargo a Deuda Futura. Para que una empresa real pague sueldos más altos y no quiebre, debe vender más mercancías y servicios. No basta cambiar de moneda o añadir tres ceros a los billetes.  El dopaje presupuestario de la Economía en Euros, duró lo que tardaron las empresas instrumentales  en quebrar discretamente, con cargo a los impuestos y a los créditos obtenidos.  Poco más de un lustro.

La Deuda Externa de España puede considerarse odiosa.  Entre 2004 y 2012, toda la red clientelar que sustentaba los gobiernos de Zapatero y aliados, se benefició del dopaje presupuestario y se dedicó a evadir capitales.  La mayoría de los créditos, que obtuvieron por razones políticas, han resultado fallidos y lastran los balances de las entidades financieras.  Buena prueba de ello, son todos los créditos formalizados para financiar la inútil producción de energía fotovoltaica. Una potencia instalada de 10.000 MW, sin demanda, que ha engordado la Deuda Externa y encarecido el recibo eléctrico de los españoles. ¿Debemos seguir pagando los ciudadanos esa Deuda a los Fondos americanos y alemanes?

Agua y basura, algunas notas sobre dos mercados interesantes.


Hace años, cuando estudié Geografía en la UNED, (la carrera de Historia incluía Geografía e Historia del arte), me llamó la atención la evolución del consumo del agua, de su ciclo y sus usos. Asi mismo, el incremento de la población en el mundo y su paralelo aumento de la producción de residuos en todas las áreas; como curiosidad según un estudio llamado “what´s a waste” del Banco Mundial, en Estados Unidos, una persona media desecha cada mes aproximadamente su peso, y los americanos no están precisamente delgados, esa tendencia, siempre según dicho informe, se duplicará en 2025. Algo parecido leí hace años en un libro titulado “Los residuos urbanos y su problemática” refiriéndose a la relación entre residuos y nivel de desarrollo. En dicho libro hablaba sobre el incremento de residuos por habitante y día desde 1980 hasta 1990, aunque sea algo viejo, los datos ya marcaban un incremento de la tasa de RSU por habitante y día de un 40 por cien en muchos casos, siendo en España Cataluña quien más produjo residuos domésticos por habitante y la que menos Galicia.

Clima, residuos, agua, población…son todos aspectos relacionados, sólamente desde una perspectiva Malthusiana, el incremento de la población en los años futuros ya denota de por sí un incremento paralelo en el consumo de agua y en lo que a tratamiento de residuos se refiere. Según la ONU, en su informe “Revisión de las perspectivas de población mundial”, en la actualidad, el globo terrestre posee aproximadamente una población de 7300 millones, estimándose un aumento a 8500 en 2030 y a 9700 en 2050. El aumento de la población es un factor claro para la demanda de agua, del mismo modo, el cambio climático afecta a la calidad del agua, y a la proliferación de sequías, en el informe del grupo intergubernamental de expertos sobre el cambio climático se describen los efectos más probables sobre el agua y las sequías, básicamente pérdida de la calidad del agua e incremento del área afectada por sequías.

Y, aunque el 70 % de la Tierra es agua, únicamente un 3 o un 4% es agua dulce, siendo un 1% potable. Estas son las razones por las que hace tiempo me puse a seguir el mercado del agua y el de residuos, pues si nada cambia, la tendencia a largo plazo es que las empresas dedicadas a cualquiera de las dos ramas, vayan a más; y así ha sido hasta ahora.

No es turismo, es una invasión


 

La economía debería ser la ciencia que estudia la consecuencia lógica de los incentivos perversos en el mercado. Todo sistema intervenido tiende a recuperar el equilibrio de una forma u otra. Pero a diferencia de otras instituciones humanas, los mercados son relativamente predecibles: es lo que propicia la especulación y el cálculo racional. La incidencia del turismo en el mercado inmobiliario español es un caso de libro.

Sentado a la sombra de un árbol en una plazoleta del Puerto de La Cruz en Tenerife,  en el verano de 2003, un anciano me dijo algo muy sorprendente: no conocía ya a más de 3 personas de su infancia en la ciudad que le había visto nacer.  Creo recordar que quedaban algunas casas viejas y debí pensar que aquellos solares debían valer una fortuna. Pero lo que contaba aquel hombre entristecido sobre la transformación de su pueblo es la constatación empírica, una vez más, de que la falsa moneda expulsa la verdadera.  Los contemporáneos de aquel tinerfeño acabaron por vender sus tierras, locales y casas al mejor postor y emigraron.

El caso de Tenerife no es muy diferente del de Mallorca, de la Costa Brava, de Málaga y de muchos otros enclaves turísticos del litoral Mediterráneo.  Millones de jubilados y turistas alemanes, británicos y escandinavos aprovechan la proverbial hospitalidad de la sociedad española para abusar de nuestras infraestructuras y bajos precios, y me molesta sobremanera que se permitan envidiar nuestras carreteras o nuestra sanidad pública.

Con la creación y diseño de la Unión Monetaria a la medida de las necesidades de Alemania, lo que se está observando con absoluta nitidez es que el Euro está funcionando como un tremendo incentivo perverso. No solo está afectando a la Economía y a los Mercados en la UE, hasta el punto de provocar recesiones y quiebras,  sino que está amenazando equilibrios fundamentales de la Política y de la Religión en todo el Continente.

La Deflación impuesta por Alemania a los PIGS tiene muchas lecturas.  En estos últimos 15 años, desde la desgraciada conversión al Euro, han pasado muchas cosas en la UE, y pocas de ellas pueden considerarse buenas o sanas. La prueba del algodón del carácter perverso de la Teoría de la Devaluación Interna (en los PIGS católicos y ortodoxos del Sur) es que se han sucedido una tras otra las crisis financieras, económicas, políticas y morales.  Desde el año 2004, no ha ocurrido nada bueno en la Historia del Proyecto Europeo: llevamos 14 años achicando agua.

No es turismo

El turismo era considerado un vector de comunicación entre los pueblos de Europa, con sus detractores y partidarios: en la última década, se ha convertido en la UE en una fórmula ladina de colonialismo patrocinada por los Ministerios de Exteriores.  El Reino Unido y Alemania descubrieron que les resultaba mucho más barato mandar a sus jubilados y ancianos a España que atenderlos en sus propias casas, y empezaron a usar la política monetaria europea para mantener hundidos los precios en Portugal, Italia, Grecia y España.

Pisos turísticos. Precios del alquiler

 

Con la recuperación económica en España, y la inestabilidad geoestratégica en los demás países del Mediterráneo,  los precios del sector inmobiliario están estallando el corsé impuesto por Alemania. La Deflación artificial del mercado inmobiliario español no está resistiendo el incremento de la demanda provocado por una economía digital P2P.  Ciudadanos suizos, daneses o británicos que pagan 3.000 euros de alquiler por pisos viejos en sus países han descubierto que pueden alquilar calidad en muchas zonas por debajo de los 1.000 euros. El negocio que están promocionando en secreto las clases medias de esos países, es que pueden alquilar un piso todo el año por menos de 10.000 euros, disfrutarlo durante meses, y alquilárselo a sus compatriotas 6 meses al año.  Han salido documentados en la prensa de países como Francia, casos de jubilados que viven 9 meses en España, y realquilan 3 meses el piso a sus vecinos y conocidos.

No es un fenómeno nuevo.  Listillos de la Pompeu Fabra, que ya he citado en numerosas ocasiones, presumían de haber vendido sus pisos en Barcelona en 2003 para irse a vivir de alquiler a Mataró. Poco a poco, muchos vecinos de Barcelona hicieron lo mismo, y ahora se encuentran en la tesitura que esos pisos vendidos a intermediarios extranjeros han sido transformados en apartamentos turísticos, con rendimientos opacos que pueden superar los 20.000 euros al año.

El PER del alquiler turístico

Los otros listillos, los ministros de Zapatero que alardeaban de PER para justificar su retórica política contra el sector inmobiliario, ahora callan como putas.  Es lógico: si un piso turístico bien situado renta 20.000 euros al año, por el método del PER alcanza un valor de mercado mínimo de 600.000 euros.  ¿Cómo encaja ese modelo con la Deflación impuesta y la famosa Teoría de la Burbuja? Pues sencillamente no encaja.  La libertad económica P2P que facilita cualquier APP ha servido para demostrar que la realidad del mercado y el valor de uso están muy por encima de los precios impuestos a la baja para favorecer la colonización de algunas regiones.  La gran diferencia entre el periodo 2003-2004 y el momento actual, es que un porcentaje significativo de la oferta inmobiliaria ya pertenece a esos jubilados e inversores alemanes, franceses y británicos.

¿Son los Fondos de Inversión una estafa legal o un espejismo?


El mejor indicador adelantado de las mayores caídas en la bolsa española se encuentra escondido a la vista en las estadísticas oficiales de la Industria Legal de los Fondos de Inversión.  

Año Participación media Comisiones en
Base 100
Ibex 35
1992 22505 100 2000
1993 24209 98 3600
1994 24183 96,04 3100
1995 24895 94,47 3600
1996 26194 92,58 5150
1997 26001 90,73 7250
1998 25508 88,92 9800
1999 25653 87,14 11650
2000 23957 85,40 9100
2001 24099 83,69 8400
2002 23965 82,02 6050
2003 25945 80,36 7750
2004 27309 78,75 9080
2005 28734 77,18 10700
2006 28841 75,64 14150
2007 28886 74,12 15200
2008 27641 72,64 8450
2009 29065 71,19 11950
2010 25947 69,77 9850
2011 25951 68,37 8550
2012 27305 67,00 8150
2013 30151 65,66 9900
2014 30065 64,35 10300
2015 28537 63,06 9550
2016 28430 61,80 9350
2017 26563 60,56 10850

Un inversor que hubiera invertido 22.000 euros  en Fondos de Inversión hace 25 años,  ha pagado un 40% de comisión acumulada a la Gestora de su Banco.  Durante ese tiempo, el IBEX 35 ha acumulado una diferencia por volatilidad de más de 40.000 puntos positivos, equivalente a 20 veces  (2000%) el nivel inicial.

El análisis de las series históricas, y rentabilidades medias acumuladas, demuestra que los Gestores se han preocupado de intentar mantener constante la participación media, haciendo un esfuerzo descarado por comercializar sus productos cuando la bolsa está en máximos.  Los partícipes de los Fondos y Planes de Pensión son ordeñados poco a poco.

El patrimonio de los Fondos Domésticos, comercializados por el sistema financiero español,  se duplicó entre 1997 y 2007, y se redujo a la mitad entre 2008 y 2013, en función de sus necesidades contables más urgentes.  La situación contrasta con la fuerte alza de otros índices fuera de España.  El DAX, por ejemplo,  multiplica su capitalización por 3.

Un ahorrador español que invirtiera 2 millones de pesetas en 1992 (Un Golf GTI 16 válvulas, con todos los extras)  hoy tiene en cartera 14.000 euros.  Ese dinero es la tercera parte del dinero que necesita para comprar un vehículo equivalente que esté “de moda”.  Su dinero, hoy, vale la cuarta parte de lo que valía hace 25 años.  De el han disfrutado los comisionistas de la Gestora del Banco. Puede decirse que con ese dinero se han pagado grandes Bonus a excelsos directivos como Ron y Saracho, grandes viajes, grandes cenas y desayunos; miles de pequeñas hormigas del sistema financiero han cumplido sus objetivos.

Los 200.000 millones de euros invertidos en los Fondos de Inversión a mediados de los años 90 han servido para que los bancos y cajas de ahorro controlaran el negocio de la bolsa en beneficio propio, y para que los intermediarios ganaran dinero a costa de los pequeños inversores manipulando a su antojo las cotizaciones. El sistema del Fondo Bueno y del Fondo Malo les ha permitido arbitrar posiciones en detrimento del partícipe condenado a comprar caro lo que ellos vendían, y vender barato lo que iban a comprar.

Cuando la vaca ya no da más leche, se vende la res para carne picada. Lo importante es que no quede rastro de ella, y no se pueda auditar la gestión.  Si los Fondos de Inversión del Banco Popular habían comprado acciones, derivados, bonos o convertibles, ya no tiene importancia.

Fondos de Inversión VERSUS Renta Fija

La mejor demostración que se puede llevar a cabo sobre la naturaleza de los Fondos de Inversión es comparar la rentabilidad que ofrecen, neta de comisiones, con la rentabilidad de la Renta Fija a Corto, Medio y Largo Plazo.  La Universidad de Navarra hizo ese estudio pormenorizado y llegó a la conclusión que la mayoría de las Gestoras ofrecía un retorno inferior al de un triste FIAMM.  Las comisiones de gestión, entre el 2 y 3%, se comían literalmente todo el rendimiento financiero del Fondo.

El inversor de 1992 que hubiera decidido invertir por su cuenta 2 millones de pesetas en bonos del Estado, hoy tendría un patrimonio neto de más de 55.000 euros netos. Es decir: tendría ahorrado más del doble de lo que tiene en sus fondo o planes de pensión.  El tiempo dedicado a la gestión habría sido mínimo.

La evolución de la participación media desde 1992 ofrece una rentabilidad neta muy inferior al 1%.  Cualquier tipo de depósito al 1% bruto habría dado proporcionado una mayor rentabilidad que los Fondos de Inversión. 

Año Participación media Comisiones en
Base 100
Bono 10 años
1992 22505 100 12,26
1993 24209 98 10,15
1994 24183 96,04 10,00
1995 24895 94,47 11,86
1996 26194 92,58 9,17
1997 26001 90,73 6,83
1998 25508 88,92 5,04
1999 25653 87,14 3,88
2000 23957 85,40 5,76
2001 24099 83,69 5,08
2002 23965 82,02 5,05
2003 25945 80,36 4,24
2004 27309 78,75 4,19
2005 28734 77,18 3,59
2006 28841 75,64 3,48
2007 28886 74,12 4,07
2008 27641 72,64 4,18
2009 29065 71,19 4,15
2010 25947 69,77 4,00
2011 25951 68,37 5,38
2012 27305 67,00 6,19
2013 30151 65,66 5,34
2014 30065 64,35 4,14
2015 28537 63,06 2,07
2016 28430 61,80 1,73
2017 26563 60,56 1,41

Fondos de Inversión VS Renta Variable y Renta Fija

El inversor de 1992, de perfil arriesgado, que hubiera conseguido replicar la evolución del IBEX 35 (amen de invertir en otras bolsas mucho más rentables) habría conseguido multiplicar aproximadamente por 6 sus 22.000 euros iniciales, sin contar un pequeño porcentaje extra en concepto de dividendos abonados.  Tendría un capital de 180.000 euros.

El inversor de 1992, de perfil más conservador, que hubiera conseguido optimizar el rendimiento de los bonos a 10 años emitidos por el Tesoro, habría obtenido un rendimiento neto anual de más de 3.500 euros al año y constituido un patrimonio de 120.000 euros.

El inversor de 1992 que se dejó engañar y o estafar por los comisionistas del sistema financiero, y metió su dinero en Fondos y/o Planes de Pensión, tiene hoy de media  menos de 30.000 euros y el poder adquisitivo de su cartera es menos de la cuarta parte del que era hace 25 años.

La pregunta, inevitable, es: si un particular se inventara por su cuenta un negocio de esa índole o características y se dedicara a captar pasivo en esas condiciones, ¿su actividad sería considera legal?

(c) Belge

Nunca formaría parte de un club que me admitiera como socio. Pero toda regla tiene su excepción.