La Quiniela de Inlucro. Temporada 2019-20


Continua la guerra entre Federación y Liga que se desató con la salida de Villar. Ha tenido que intervenir un juez para poner algo de orden en los disparatados horarios de cada jornada.  Dicen querer luchar contra el creciente fraude de las apuestas deportivas,  pero tienen al enemigo en casa.  Perjudican los intereses de los quinielistas y de ONLAE para beneficiar, con descaro, a las casas de apuestas.  En el primer boleto de la temporada, dejan fuera cuatro encuentros de Primera para colocar los de Segunda.

Tras los líos en los vestuarios de Madrid, Barcelona y Valencia, el Atlético de Simeone y el Sevilla de Lopetegui parten con más oportunidades que nunca. Pero ya se sabe: nada tienen que ver los partidos amistosos de julio y agosto con el desarrollo de la competición.

La Quiniela

Partido Pronóstico Pronóstico Resultado
Eibar Mallorca 1X 2 2
Atlético Sevilla 1X 2 X
Getafe Celta 1 X X
Osasuna Español X2 1 1
Valladolid Bilbao X2 1 2
Levante Granada 12 x X
Villarreal Leganés 1 2 2
Betis Real Madrid 2 x X
Extremadura Oviedo X 1 2
Huesca Fuenlabrada X 1 1
Numancia Racing X 1 2
Almería Deportivo X 12 1
Rayo Elche 1X 2 2
Málaga Zaragoza x2 1 2
Barcelona Sociedad 2-2 1-2 1-0

1 columna 7 reducidos. 12 euros


Lista provisional de Participantes 2020/2021

Bote + premios Participante Total Jugado 2017/18 Total Jugado 2018/2019 Total jugado 1-27
2019/2020
Sept -julio 20/21
(Primitiva)
0 Cascoporro 125 euros 116, 36 euros 78 euros 120 euros
0 Andrés 122 euros 89,38 euros 78 euros 73,2 euros
0 Tartesos 121 euros 111,36 euros 78 euros 76 euros
0 Charly 82 euros
0 Konstancio 86 euros 57,2 euros
0 Dave 82 euros
0 Kikova 126 euros
0 Sawalhas 122 euros 67, 36 euros
0 euros Belge 139 euros 119,36 euros 78 euros 185,4 euros
+ 22 euros Vincent 121 euros 116,36 euros 78 euros 185,4 euros
Libro Capodimonte 202 euros 119,36 euros 78 euros
Rafa/Victor 6 euros 7,5 euros
Santiago 79 euros
Rufi 28,33 euros 21 euros
Lechu 144 euros 119,36 euros 77 euros
Alfonso 188 euros 119,36 euros 77 euros
13 euros Club InLucro 22,5 euros 38,2 euros 8,5 euros
PREMIOS 155,73 euros 54,65 euros 491,77 euros

Múltiple de 7 números ( 7 euros )

 

Bohemian Rapsody


Cine de verano. Hacía frío, pero era una cita ineludible. Queen, la peli. Me la perdí en su día, por pereza o por hastío. Demasiadas veces, la cartelera da repelús y no incita a desplazarse: ver cine por obligación o costumbre no es cine. Propaganda, tal vez. Hollywood y la potente industria musical de los EEUU son las piedras angulares de la Globalización. La PAX americana es cine mudo con la banda sonora de Sinatra.

Paul Anka se apropió, en plena guerra de Vietnam, de un título mítico de la canción francesa.  My way no es una simple versión de Comme d’Habitude. La reescribió por completo para Frank Sinatra. El éxito se hizo de esperar. Lógico: es un monumento edulcorado con letras ñoñas de un todo a cien. De una a otra, hay la distancia que va de una Francia que llora la pérdida de Argelia y la Indochina a una América que bombardea Camboya y Vietnam con Napalm.

El incipit de este análisis, que versa sobre lo que es y ha devenido el periodismo, tiene mucho que ver con Bohemian Rapsody. La actuación de Queen en el Live Aid de Wembley empezaba con la mítica e insuperable pieza de Freddy Mercury y acaba con la legendaria We are the champion at the word. Recordé de golpe el motivo de mi tesis doctoral. Inspirada por el festival benéfico que había organizado Bob Geldof para recaudar fondos a favor de Etiopía, se esforzaba por explicar cómo sería la comunicación en un futuro casi inmediato y cuál sería la función de la prensa en un mundo globalizado.No me equivocaba, y en aquel año de 1985 “inventaba” lo que hoy son Internet y las redes sociales.

Las imágenes de la hambruna bíblica en Etiopía se remontan a octubre de 1984. Un reportaje de Michael Buerk para la BBC daba la vuelta al mundo y comocionaba a Occidente, casi un año después de que el gobierno etíope solicitara ayuda alimentaria internacional. La tragedia bíblica en el único país africano que nunca había sido colonizado brindaba un debate político muy diferente al del SIDA o al de los Boat People. Facilitaba el reproche moral. No hacer nada propiciaba la hecatombe en el Cuerno de África. ¿Pero qué podía hacer el simple ciudadano, más allá de sentirse culpable y donar algo de dinero? La respuesta no es evidente: comprometerse con los valores de la incipiente Globalización, comprar el pack completo, sin rechistar. Un chute de puritanismo adulterado.

La lógica implícita de aquella pregunta permitía vaticinar, en los años 80, cómo sería el mundo nihilista que iban a crear los informáticos e ingenieros de Silicon Valley. Lo confirmaba Jarón Lanier en un libro reciente: los algoritmos tienen un marcado sesgo que refuerza todo lo negativo. Viene a decir que el Odio es adictivo… y más barato de producir que el Amor. La misma conclusión que este humilde servidor, tres décadas después.

La totalización del lenguaje, que Georges Orwell recreaba en Rebelión en la Granja y en 1984, se extrapola de los postulados del análisis marxista. El desarraigo del hombre urbano le deja sin palabras para “comunicarse” con el mundo natural que le rodea. Debe tomar prestadas palabras ajenas que para él no significan nada. Lo mismo, un Unicornio que un Caballo. La alienación política y religiosa que describe Karl Marx es un universo de referencias huecas, desprovistas de contenido real.

La propaganda sustituye la información por el sencillo procedimiento de reducir el número de palabras y simplificar la sintaxis. Sujeto, verbo y predicado. La jerarquía de la pirámide invertida, que le enseñan a todos los estudiantes de periodismo en el mundo, es una estupenda coartada para darle gato por liebre al lector. Sirve para reforzar los prejuicios morales y religiosos que le han inculcado a la chita callando. Lo típico y lo tópico que nos venden los publicistas y los tertulianos, con el método de la repetición. El titular determina y el eco de lo mismo predispone. Es pura fisiología: el cerebro tiende a procesar la información relevante de un modo automático. Cuando el semáforo se pone rojo, frenamos. Descubrimos lo nuevo, conocemos de un modo activo y luego reconocemos señales sin darnos cuenta.

El periodismo moderno, que entró en barrena con el desarrollo de la comunicación cibernética, ha devenido propaganda política y proselitismo religioso por la nula voluntad de las empresas a adaptar su modelo de negocio. Tan acostumbradas a vivir de las migajas de la política, al servicio de los más corruptos siempre, que no vieron la oportunidad. Al contrario: se cerraron en banda.

Nada hay más tópico que una canción, con su estribillo pegadizo. Escucharla mil veces en la radio, cantarla a coro en un concierto. Es una experiencia religiosa, si. Es el modelo que intentan imitar unos periodistas convertidos en telepredicadores. El éxito profesional al que aspiran, es dar la nota en verano.

El concierto de Wembley resultó ser un funeral.  Solo faltaba que cayera el Muro de Berlín para derramar unas lágrimas.  ¿Qué mejor idea que tocar Bohemian Rapsody, esa genialidad que la Industria musical no quería producir, que las radios no querían programar? En los últimos 30 años,  no se ha vuelto a producir ni un solo álbum de Rock And Roll que se pueda escuchar ni se ha publicado un sólo articulo de prensa que se deba leer.  Música de supermercado, periodismo de sala de espera.  

(c) Belge

 

 

La Quinta de Mortadelo


Pensé que era una broma. Me equivoqué: era una provocación. El autor del panfleto,Imperiofilia y tal y tal, es al parecer catedrático de filosofía. No tengo nada contra los catedráticos de la Complutense, pero los que conocí en 1990 no me dejaron buena impresión. Demasiado exigente, supongo. Pero la reseña del libro no deja lugar a dudas: El ensayo de María Elvira Roca Barea ha escocido y ha producido sarpullido entre los marxistas habituales, acostumbrados a que nadie tosa sus postulados religiosos. La tesis del ataque premeditado a los PIGS católicos, fue mía en su origen y la recojo documentada en La Estafa del Euro explicada a un niño de 6 años. Me obliga, aunque los 100.000 ejemplares vendidos de “Imperiofobia” no necesitan mayor defensa.

Decía Francisco Quevedo que “la envidia va tan flaca y amarilla porque muerde y no come”. Por más que los apóstoles del marxismo luterano crean que las luchas de clases y colectivos oprimidos son los motores de la Historia, lo cierto es que nos determinan la estupidez ciega, el ansia viva y la envidia cochina. Cuando se agitan con unas gotas de odio, forman un cocktail nihilista explosivo. El gran mérito de la filóloga Elvira Roca es haber mostrado cómo esas mismas fuerzas reaccionarias desencadenaron la revuelta protestante contra el legítimo soberano en los feudos germanos y holandeses. Un enfoque original, que tiene el inmenso mérito de describir el incipiente luteranismo en su siniestro y justo contexto.

Nadie ha ilustrado mejor la divertida composición de esas tres fuerzas en la España contemporánea que el genial Paco Ibañez. Mortadelo ha cumplido 61 años, y sus coetáneos ya prejubilados se dedican a jugar a la petanca en parques y descampados. Es un juego importado, al alcance de todos. Como el cangrejo americano ha suplantado a las especies autóctonas de nuestros ríos, la petanca francesa ha sustituido poco a poco a la tradicional “calva” de nuestros mayores.

El mayor logro de la Quinta de Mortadelo es haber engendrado a la Generación Botellón. Los mal criaron como personas, los mal formaron como estudiantes y los deformaron como ciudadanos, a imagen y semejanza. Padres e hijos son igual de envidiosos y codiciosos, aunque unos lo sean por resentimiento y otros por sacarle todo el jugo a su herencia. El egoísmo y el ventajismo les ha llevado de forma natural a comulgar con los dogmas feudales del apartheid social y de la predestinación de los Puros.

El colofón de este breve análisis es el relato de una de esas estampas maravillosas de la Rúa del Percebe. El protagonista es catalanista, para más inri. Socialista por padre e ingenuo por madre, se deja caer a menudo por la tierra de sus ancestros, hermanos y sobrinos. Restado por la edad, dejó de lado su pasión por la bicicleta y se aficionó a la petanca. Pero no había pistas, ni la más mínima afición en el pueblo. Pensé que era una broma. Me equivoqué: era una provocación. Quería poderles echar en cara a los de su Quinta, que eran pobres hasta para pedir. Se puso mano a la obra, y convirtió una escombrera detrás del Polideportivo Municipal en terreno de juego. 5 pistas, sombreadas en verano, ventiladas, y con un balcón espectacular a la Sierra de Gredos.

Cuando no estamos peleados, que es siempre, el prota de la anécdota me cae bien. No me gusta la petanca, me aburre. Tampoco me gustan los dardos, ni la pesca, todas esas competiciones extrañas que le chiflan. No me gusta el ambiente que crean, difícil de describir. De modo que soy el testigo neutral y ecuánime del éxito asombroso de una iniciativa que no le costó ni un euro al contribuyente.

Las medallas que concede el caprichoso azar son siempre inesperadas, pero nada es tan imperdonable como el éxito. Sabido es que en España sólo sacan a hombros a los muertos en sus féretros. Los demás se pueden pasar la vida esperando a que les den las gracias, salvo que hagan como una encajera de un municipio cercano. Harta de esperar el merecido reconocimiento que le regateaban sus vecinos, encargó ella misma la estatua y la colocó en la plaza del pueblo.

La Quinta de Mortadelo va a dejar como herencia una España vaciada de contenido y completamente descapitalizada. Resistió 3.000 años de adversidades, pero han bastado 2 o 3 décadas de bonanza para acabar arruinada y desolada de sí misma. La envidia muerde y no come.

© Belge

Año 0. Día 12. Pacto de Sangre


…Y al despertar, el dinosaurio seguía ahí. Manido, si, el tópico, pero es que la desganada Investidura de Sánchez, el candidato que salió del 28 de abril de marras con menos votos y menos escaños que Mariano Rajoy Grey, se ajustó al guión. Pésimo sainete de verano que los actores convirtieron en burda pantomima. La cara de asco del candidato, la decepción de Rufián, la sonrisa interior de Casado, los nervios de Abascal en su debut….nada comparado con la mímica cifrada de Pablo Iglesias. En algunas tomas fugaces, el realizador consiguió captar que tenía al toro donde quería, rodeado en el centro del tablero. La anécdota divertida la protagonizó Albert Rivera. Llegó tarde, cuando la Sesión de Investidura había finalizado.

Quedó patente que el Pacto de Sangre de Iglesias y Junqueras iba a condicionar el Debate y las negociaciones de última hora. No se fían del Psoe, y mucho menos de Sánchez y sus patrocinadores del Lobby catalán. Como anticipamos en su día, no son de fiar: nunca pagan sus deudas. La gestión de la sentencia del Juez Marchena es tan compleja que precisa de testigos, avales y garantías patrimoniales ante notario. La ideología y los principios son sagrados, pero con las cosas de comer no se juega.

Era mucho riesgo dejar para septiembre la negociación para formar gobierno, y Rufián quiso remarcar lo que significaba la abstención de ERC. Aún así, la Prensa del Régimen está a por uvas. El precio del gobierno se va a disparar. En julio, eran una Vicepresidencia simbólica y un ministerio importante, pero en septiembre, serán las llaves de la Moncloa. Una Vicepresidencia y dos carteras estratégicas para obligar al Psoe a cumplir sus promesas.

Pedro Sánchez es transparente: cuelga de unos pocos hilos que maneja el Lobby catalán. Es una marioneta en funciones, ese títere que abuchean los niños cuando sale a escena. Hoy interpreta un papel, y mañana otro. Sus asesores le han contado que saldría ganando si se repiten las elecciones, pero confían en conseguir comprar el apoyo de Ciudadanos de aquí al 23 de septiembre. Era lo único que necesitaba saber para presentarse a la Investidura. Pero resultó ser tan obsceno que no dudó en dirigirse a Albert Rivera… ¡en el turno de réplica a Santiago Abascal!

© Belge

Nunca formaría parte de un club que me admitiera como socio. Pero toda regla tiene su excepción.