Y llegó la censura, puntual a la cita. Los políticos y activistas que se dejaban la voz gritando contra el gobierno de Rajoy por un caso de Ebola en Madrid, silencian el contagio masivo del Coronavirus en España. Los mercenarios que entonces jugaban a alarmar a la población de un modo insensato hoy se niegan a explicar las estúpidas decisiones que toman y la información intoxicada que filtran a los periódicos.
Hans Rosling escribió un libro antes de morir para confesar el pecado que le atormentaba. Al final de su best seller póstumo, que han leído todos los directivos del mundo sin entenderlo, el médico sueco cuenta cómo su decisión de cortar una carretera le costó la vida a decenas de mujeres y niños en un pueblo de África. Para colmo de desgracia, el supuesto contagio que motivó tan drástica medida, resultó ser una simple intoxicación alimentaria.Calvinistas, luteranos y demás marxistas que nos toca padecer por ser contemporáneos, acostumbran a matar las moscas a cañonazos. No se les pone nada por delante, no cometen errores: Son pueblo elegido. Si algo falla y sus estrategias provocan el caos, enseguida buscan a quién culpar. Será por sospechosos habituales. Nunca faltan candidatos en ese casting, ni quien redacte el escrito de acusación. Un chino se come un animalito salvaje en Wuhan y desata una pandemia mundial. Dicho así el guión de la peli parece poca cosa, pero el público no da más de sí.A esta hora, son ya más de 100 los pacientes que han sido infectados, desde que se diera a conocer el primer caso en Tenerife. La única medida del gobierno ha sido acusar a los médicos de quedarse las mascarillas protectoras. La Opinión Pública ya sabe que si faltan mascarillas en España es porque las han robado para revenderlas por Amazon por 1.000 euros. El médico tiene todas las papeletas para llevarse el Goya al malvado del año.Los políticos del Partido Nacional Socialista Obrero Español que llevan año montando cuarentenas y cordones sanitarios para proteger a los españoles del contagio ideológico, ahora no dan la cara. No dicen nada. Han puesto a un tal Fernando Simón por medio, disfrazado de experto portavoz, para que nos les relacionen con la emergencia económica y sanitaria que se les viene encima. Si no eres chino y no comes serpientes, que no hay que preocuparse, que de algo hay que morir, que primero la palman los más viejos y los que están enfermos Al pairo, esperando que les diga Ángela Merkel que deben hacer para proteger los intereses de Alemania. Lo más probable es que sus próximos mítines electorales los tengan que hacer en petit comité.P.D. El número de contagiados se multiplica por 2 cada 3 días. Es 1% de contagio por hora.© Belge(Visited 553 times, 1 visits today)