¿Defrauda UBER? La Teoría del Justiprecio


El justiprecio es una teoría relacionada con la Política Económica escolástica en la época medieval.  Hunde sus raíces en el concepto de precio justo de Aristóteles que distingue valor de uso y valor de cambio para satisfacer el principio de justicia conmutativa.

Los grandes estudiosos del Justiprecio (Jacques Bude, ULB, 1983) relacionan la teoría renovada de los escolásticos de la Escuela de Salamanca con el fortalecimiento de la Cultura Católica, frente a la presión mercantilista de las Plazas Comerciales del Norte de Europa. Con una advertencia: cuando los distintos autores medievales se escandalizan por la subida de los precios en la zona mediterránea, se está hablando de una inflación anual inferior al 2%.

Frente a las tentaciones más o menos esclavistas de monetaristas y mercantilistas , el concepto de justiprecio sigue latente en algunos planteamientos económicos aparentemente modernos.  El pulso desigual que se libra en distintas ciudades europeas entre la mutinacional americana UBER y los taxistas locales  es una réplica exacta de aquel debate que enfrentaba a comerciantes y usureros con los distintos gremios partidarios del justiprecio.

Con el método de tasar el justiprecio del transporte en coche, es fácil comprobar que el cuento de los algoritmos maravillosos que se usan para mejorar la movilidad en las ciudades es una milonga a la que ha puesto letra un colectivo de periodistas y tertulianos reconvertido en lobby de UBER.  En el siguiente cuadro, se pueden comparar las tarifas oficiales de unos y otros, y el justiprecio por km recorrido, para un coche de gama media conducido por un trabajador autónomo que declare unos ingresos mínimos.

Conceptos Tarifa Uber Tarifa Taxi Justiprecio
Km recorrido
(120 N/300 B)
1,20 euros neto 1,18 euros neto 0,35 euros bruto
Baja Bandera
(10)
5 euros 2,6 euros 2 euros
Cancelación
(1)
5 euros 0 euros 5 euros
Minutos
(150 N/500 B)
0,1 euros neto 0,4 euros Neto 0,12 euros bruto

Un conductor autónomo que se compre un coche de 30.000 euros y recorra 300.000 km  en 3 años para conseguir 9.000 carreras (10% fallidas) tendrá unos gastos brutos de 180.000 euros. Eso implica necesariamente que debe obtener unos ingresos mínimos de 22 euros por carrera o de 220 euros por día.

¿En qué lugar dejar esas cifras objetivas a los conductores que se apuntan a trabajar como autónomos para UBER?  Gracias a la tecnología mejorará, sin duda, la eficiencia de los kilómetros recorridos en la captación de clientes,  pero el salario de la espera está claramente por debajo del coste de los impuestos.  Recibe, de media, un máximo de 15 euros diarios, muy por debajo de los 30 euros que le cuesta pagar la Seguridad Social y liquidar el IVA.  Suponiendo  – y es mucho suponer – que UBER le garantice un mínimo de 100 km útiles cada día de trabajo, habrá cubierto el coste de llenar el depósito y asegurar el necesario mantenimiento del vehículo.

Dicho de otro modo: o el conductor de UBER pone el coche y trabaja gratis, o se las ingenia para ahorrarse los impuestos que le corresponden. Y si, además, la multinacional se las ingenia para declarar en otros países las comisiones que “trinca” en las ciudades españolas por “mejorar la movilidad”, tenemos una radiografía bastante elocuente de su modelo de negocio.

El verdadero objeto de negocio de UBER no son los taxistas ni los clientes; son los conductores autónomos a los que explota. Es un modelo laboral de tipo piramidal, como ocurre con Google.  Solo una parte de la pirámide está emergida; la más ancha, está hundida. Los trabajadores sumergidos aguantan la respiración tanto como pueden, hasta que se ahogan. Una vez descapitalizados, son sustituidos por otros.  Los clientes, urbanitas que se benefician de los costes hundidos, aplauden con las orejas.

(C) Belge

UBER: ¿Qué hubiera dicho Jesús Cristo?


El famoso poema del pastor luterano Martín Niemoller, atribuido al dramaturgo Bertold Brecht, fue en realidad un sermón que bien pudo titular: la confesión. “Cuando los nazis vinieron a buscar a los comunistas, guardé silencio, porque yo no era comunista.”

Los mecanismos de solidaridad entre los miembros del cuerpo social determinan la fortaleza de esa sociedad y su capacidad para resistir toda suerte de adversidades.  En un entorno ideológico y cultural que promueve el atomismo social, sobran los motivos para no solidarizarse con los demás.

 

“Cuando los nazis piratearon a los músicos,
guardé silencio,
porque yo no vivía de la música.
Cuando arruinaron los cines,
guardé silencio,
porque yo no iba al cine.
Cuando cerraron las librerías,
no protesté,
porque ya no compraba libros.
Cuando vinieron a por los taxistas,
no pronuncié palabra,
porque yo no era taxista.
Cuando finalmente callaron los periódicos,
ya no había nadie a quien informar”

En un entorno de deflación como el que nos ha impuesto Alemania desde el año 2008, lo más sencillo es recelar de los demás y buscar el provecho inmediato. Si el precio de las cosas baja, aquellos que mantienen intactas sus rentas consiguen más por menos. Lo hacen a costa de aquellos empresarios que tienen que echar el cierre, de aquellos inversores que tienen que liquidar sus activos, de aquellos colectivos que tienen que renunciar a ejercer sus legítimos derechos.

La cultura mercantilista de los protestantes, desde el final de la Edad Media, aborrece del Justiprecio de los católicos. De nada sirve explicar que el kilómetro que recorre un coche tiene un coste fijo, ya sea con licencia de Taxi, con licencia VTC, o como simple particular.  El mantenimiento de las infraestructuras supone otro coste fijo, que corre a cargo de todos los vecinos, y el porcentaje de personas que sufren un accidente de tráfico es atendido con los impuestos de todos los contribuyentes.

P.D.  Cambiaré de opinión sobre UBER el mismo día en que uno de sus coches franquiciados acuda a prestar servicio a los vecinos de cualquier pueblo de Teruel con las mismas facilidades que a un ciudadano de Barcelona o Madrid.

Prestación de maternidad e IRPF (y sigue).


¿Recuerdan el artículo sobre la prestación de maternidad? https://inlucro.org/prestacion-por-maternidad-e-irpf/ En abril, ni más ni menos que tres consultas vinculantes tres, de la Dirección General de Tributos: V0954-17, V0955-17 y V 0956-17 y todas ellas con la misma pregunta: el consultante ha recibido una prestación por maternidad del Instituto Nacional de la Seguridad Social. Si a la vista de la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, de 6 de julio de 2016, la prestación referida debe entenderse exenta en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas. Sentencia, que todo hay que decirlo, salió pregonada en todos los medios de comunicación, invitando a todos los afectados a acudir a los despachos de abogados para hacer las oportunas reclamaciones de devolución de impuestos pagados de más.

Y como no puede ser de otra forma, todas ellas responden de la misma manera: las prestaciones públicas del régimen general de la Seguridad Social por el concepto de “maternidad” no estarán exentas del Impuesto… también estarán exentas las prestaciones públicas por maternidad percibidas de las Comunidades Autónomas o entidades locales”, por lo que solamente es aplicable la exención a las prestaciones por maternidad satisfechas por los citados entes territoriales.

Por supuesto, las tres consultas vinculantes remiten a la Resolución del Tribunal Económico-Administrativo Central de 2 de marzo de 2017.

Pongo el enlace a una de las tres consultas vinculantes, la V0954-17, son las tres exactamente iguales: http://petete.minhafp.gob.es/consultas/?num_consulta=V0954-17 Lo que sí es seguro es que hoy tampoco tendremos ninguna notica al respecto en los medios de comunicación.

alrodrigo

El IV REICH


 

Los líderes políticos se definen por dos virtudes: sobreviven y miden los tiempos.  Pasan desapercibidos escondidos en la retaguardia hasta que eligen el momento para colocarse al frente de la manifestación.  Susana Díaz tiró la piedra a destiempo y no supo esconder la mano.  Dejó pasar una tras otra todas las oportunidades para dar un paso al frente y reclamar la Secretaría del Partido Socialista. Todo lo contrario a Ángela Merkel, que supo permanecer inofensiva a la sombra de Helmut Khol hasta que reclamó el liderazgo de la CDU.  En poco más de una década, se ha convertido en el  Kaiser de una Alemania imperial y hegemónica.

La elección de Pedro Sánchez como nuevo Secretario de Organización del PSOE es una mala noticia para el devenir de España. Unos 60.000 militantes profesionales, que sólo aspiran a vivir de la política, han arruinado la precaria estabilidad de la economía española y todos los esfuerzos acometidos desde 2011. La lectura unánime que van a hacer fuera de nuestras fronteras, es que antes o después el catalán Albert Rivera traicionará al PP de Rajoy y abrirá la puerta a un gobierno Tripartit, formado por socialistas, radicales y nacionalistas.  La clave de bóveda del acuerdo que patrocinará La Caixa y bendecirá Merkel es el nuevo estatus privilegiado de Cataluña tras una Reforma Unilateral de la Constitución de 1978. Pasa por arruinar definitivamente a Castilla y establecer un derecho de pernada sobre la economía y el comercio en una nación española convertida en protectorado alemán.

El puritanismo de opereta de la izquierda radical tiene como objeto justificar la campaña de agresión frente al gobierno elegido en las urnas y hacer olvidar su profundad deslealtad para con pueblo español y su Historia.  Toda la política económica de los gobiernos de Zapatero ha consistido en precarizar la economía y cargarla de deudas impagables. El líder del PSOE recibió una España con una deuda de 380.000 millones de euros en 2003 (45% PIB real)  y dejó en herencia una deuda de 850.000 millones, equivalente al 100% de un PIB colapsado por la destrucción de 5 millones de puestos de trabajo.  La suma de las deudas públicas, privadas, corporativas y bancarias se multiplicó por 4 entre 2004 y 2012, sin contar la revalorización del euro.  Todo ese dinero atracado a los consumidores y contribuyentes fue transferido sigilosamente a Cataluña (600.000 millones) y a Alemania (1 billón de euros).

Mariano Rajoy, que logró empatar las elecciones del 20-D y 26-J, se encuentra ahora en una posición muy comprometida.  Se durmió en los laureles tras el Congreso del PP en febrero, y le han hecho la cama. En aras al diálogo político con los catalanes de Ciudadanos y los vascos del PNV, ha abdicado de algunos de sus principios y está dispuestos a aprobar unos Presupuestos Generales del Estado que firmarían sin dudar el Psoe y Podemos en una “cata” a ciegas. Pero en cuanto estén rubricados y votados, Ciudadanos traicionará al PP y facilitará un gobierno Tripartit que no tendrá que negociar nada.  Aprobar los PGE de 2017 (y 2018) sería un suicidio político.  Si el  PP no quiere ser  rehén de una Oposición desleal , debe convocar nuevas elecciones antes de aprobar los Presupuestos Generales del Estado.

 

 

La alternativa a un gobierno del PP,  tras propiciar Albert Rivera la caída de Rajoy,  es la formación de un gobierno Tripartit que buscará provocar la Quiebra de España en un plazo de dos años.  Es el tiempo que necesitarán par que el pago de la Deuda se vuelva insostenible y los acreedores internacionales decidan Intervenir y Dirigir la política económica en España. Recortarán las Pensiones un 30% y privatizarán la Sanidad Pública con el pretexto de cobrarse la Deuda.  La Sanidad Pública Española es Buena, Bonita y Barata, y constituye un agravio insoportable para los acreedores protestantes partidarios, ellos, del apartheid de las razas.

Dentro de dos o tres años, cuando los españoles se quejen por la nueva situación, habrá que recordarles que fueron ellos los que jaleaban y aplaudían con las orejas a gentes como Pablo Iglesias y Pedro Sánchez.  Habrá que decirles, sin rodeos, que fueron ellos los que eligieron y sellaron su propio destino.  Trabajaran como camareros en Alemania, mientras los alemanes disfrutan de sus nuevas propiedades en España.

© Belge