Máxima expectación liguera por el pésimo momento de forma que atraviesan el Real Madrid y el Atlético. El Málaga puede dar la sorpresa esta jornada. Pero si se cumplen los pronósticos, el bote será pequeño esta semana.
Se cumple un año de la elección de Donald Trump como Presidente de EEUU. Al contrario de lo que afirmaba el Coro de los Demócratas y Beneficiados, no se ha acabado el mundo. Para sorpresa de muchos, incluido quién escribe estas líneas, 2017 ha sido uno de los ejercicios bursátiles y políticos más apacibles que se recuerdan. Todo ha sido subir y subir, con pausas y, a veces, con prisas. Más de un 40% de subida en el Dow Jones.Algunas cosas están cambiando muy de prisa y otras siguen igual. Este es un pequeño análisis de tendencia, al que seguirán otros en la próximas semanas. Trataré de explicar el estado de hipnosis colectiva que están padeciendo los inversores. Los Bancos Centrales insisten en neutralizar cualquier atisbo de riesgo anegando los mercados. Las consecuencias ya se empiezan a notar.El Ibex 35, que venía lastrado por la inestabilidad política desde las Municipales de mayo de 2015, despertó el pasado viernes de su letargo de 2 años. Ha vuelto a acumular un severo retraso con relación a los grandes Índices mundiales y sigue por debajo de los precios a los que cotizaba antes de año 2008. En teoría, tiene el camino despejado, de aquí al 31 de diciembre, para recuperar y superar la cota de los 11.000 puntos. Pero no todos los valores tienen el mismo potencial.A continuación y a título ilustrativo, una tabla con una selección de valores importantes que deberían empujar el Índice al alza.
Felipe VI y Mariano Rajoy Brey, a la sazón Rey de España y Presidente del Gobierno en el año 2017, han entrado en la Historia por la Puerta Grande. No vamos a jugar a glosar lo obvio. Ya se encargarán de ello enjambres de periodistas y tertulianos, comentando con gran énfasis y solemnidad profesional todo lo que no vieron venir ni acertaron a explicar. Tan solo un pequeño y obligado paréntesis. Si no se analiza el espectacular movimiento estratégico que se sacó de la chistera Rajoy, es casi imposible describir los derroteros por los que van a transitar la política y la economía en los próximos meses.La “celada” del pasado viernes 29 de octubre es un asombroso prodigio de belleza plástica e intelectual. El regate en corto del Presidente del Gobierno, si se nos permite este pequeño juego de palabras, dejó sentados a propios (Albert Rivera y Pedro Sánchez) y extraños (Oriol Junqueras, Urkullu, Colau y Pablo Iglesias). Todos los que calculaban que el suicidio de Puigdemont y del PdCat les beneficiaba y dejaba en franquicia el Poder se encontraban, de repente, atrapados en su propia lógica. Al renunciar Rajoy a disputarle la calle a la CUP y ERC, y convocar elecciones, ha dejado al nacionalismo catalán sin retirada en una incómoda tierra de nadie. No van a tener fácil convencer a sus huestes dispersas en el monte que les movilizan, en las Elecciones Autonómicas del 21 de diciembre, para gestionar las nóminas de los funcionarios catalanes.La gran belleza que encierra la jugada de Mariano Rajoy no solo estriba en la economía de los medios empleados, al ahorrarle cualquier desgaste al Partido Popular en el Congreso, tal y como esperaba toda la Oposición, sino que obliga a Ciudadanos, al Partido Socialista, a Podemos y al PNV a trabajar en beneficio suyo en Cataluña y en España. La inevitable victoria de Ciudadanos, PSC y PP deja desarbolada a Colau en Barcelona y rota la alianza de Podemos y Pedro Sánchez en Madrid. Pablo Iglesias fue el único político que vio venir el desastre de la DUI, pero no lo pudo evitar. Lo más probable es que presente su dimisión el 21 de diciembre por la noche.El resultado electoral de las Elecciones Autonómicas en Cataluña y la configuración del Parlamente van a depender de la aplicación de la Ley D’Hondt en la circunscripción de Barcelona. Dos son las variables a tener en cuenta: el incremento de la participación, hasta niveles históricos, y la ruptura de la alianza Junts per el Si entre ERC y PdCat. Es bastante probable que la extinta CIU se presente con una nueva marca política, si llega a tiempo, del estilo: “partido reformista de Cataluña”.El siguiente cuadro muestra cual podría ser la evolución del voto y su traducción en escaños.
Muchos ciudadanos españoles se han desayunado hoy con la noticia de que Carlos Puigdemont, el hasta ahora líder accidental del PdCat (extinta CIU), está solicitando el Asilo Político en Bélgica. Se vale de la tradicional y magnífica relación que han mantenido los partidos flamenquistas con el nacionalismo catalán y vasco. No conocían a los flamencos.A petición de algunos usuarios de INLUCRO, he traducido la letra de la canción Les Flamingants que Jacques Brel les dedicó en uno de sus últimos álbumes. Jacques Brel, un verdadero genio universal de la Cultura, era de origen flamenco, nacido en Bruselas y cantaba en francés.Nadie en España ni Cataluña se atrevería jamás a componer y cantar una canción así.Les Flamingants chanson comique…Los catalanistas, canción cómica Messieurs les Flamingants j’ai deux mots à vous rireSeñores Catalanistas, tengo que deciros dos cositasIl y a trop longtemps que vous me faites frireHace demasiado tiempo que me tenéis fritoA vous souffler dans le cul pour devenir autobúsEstáis tan llenos de aireVous voilà acrobates mais vraiment rien de plusQue parecéis globlos, pero nada másNazis durant les guerres et catholiques entre ellesNazis durante las guerras y católicos entre ellasVous oscillez sans cesse du fusil au misselDudáis entre coger la escopeta o el rosarioVos regards sont lointains votre humour est exsangueTenéis la mirada perdida, carecéis de sentido del humorBien qu’il y ait des rues à Gand qui pissent dans les deux languesAunque hay calles en Gante en las que meais en las dos lenguas