Año 1. Día 3. La Escuela Impúdica

Jules Ferry era francés. Muy francés y un poco anticlerical. Como Ministro de Instrucción Pública y Primer Ministro, puso fin al reino de taifas que era la educación escolar en las distintas regiones. Francia venía de sufrir una humillante derrota militar frente a Alemania y buscaba un chivo expiatorio al que sacrificar. Jules Ferry acaba con la resistencia de la Iglesia e impone un sistema de enseñanza pública gratuito, obligatorio y universal. Nacionalista y militarista. 100 años después de instituido el modelo, en Francia y Bélgica se impartían clases de Moral y los niños seguíamos recibiendo instrucción militar en los recreos. Doy fe.

La izquierda española es marxista por padre y republicana por parte de madre. Nazi de lunes a viernes y jacobina los fines de semana, pero por dinero comulga de rodillas, con la boca abierta y los ojos cerrados. Por un duro cantaba el cara al sol y ahora por un euro, se apunta a un bombardeo. El drama es que en un mismo discurso mezcla las dos frases que copia en alemán con las tres que plagia en francés. Nos sale republicana en defensa de la Escuela Pública pero adereza el modelo con un toque feudal. Multiétnica por la mañana, localista por la tarde. Jules Ferry ya no reclama los territorios de Alsacia y Lorena, sino que se los cede gustoso a Alemania.

La fascinación puritana por lo obsceno y lo escabroso, tan reconocible en la cultura alemana de los años 20 y 30, es una enmienda a la libertad universal. Del mismo modo que no hay iglesia sin sacristia, no hay libertad sin intimidad. Si la izquierda quiere enseñar a creer, a pensar y a masturbarse correctamente no es para liberar; es para controlar, someter y encadenar. Para esas gentes del Norte inhóspito, la tierra es del viento, el rebaño es del lobo, y el sexo es de todos: ¿cómo van a pertenecer los hijos a sus padres? En buena lógica, son los niños soldados que deben adiestrar para la Causa. Las obligaciones del siervo son dos: pagar impuestos y criar soldados.

Es interesante analizar la evolución de la Escuela en Occidente. Del precepto particular a la cultura universal, de la Ilustración a lo Público, de la instrucción obligatoria al adoctrinamiento social. Y, como si de una paradoja se tratara, con el totalitarismo la privatización de la Educación deviene inevitable. Se cierra el círculo en aras a la salvaguarda de la libertad humana.

© Belge
(Visited 172 times, 1 visits today)

Deja un comentario