Dios se cansó de hacer milagros. A esta alturas, tras una debacle sin precedentes del Centro Derecha en España, son mayoría los que siguen sin entender a Mariano Rajoy. La noche electoral dejó dos claros ganadores: Pablo Iglesias, que ideó la estrategia que llevará al Psoe a gobernar los próximos 4 años, y Mariano Rajoy que, en peores circunstancias, logró salvar dos match ball en 2015 y 2016 y gobernar hasta mayo de 2018. Le apuñalaron hace hoy justo un año.
La profecía de Casandra existía, por partida doble. Se publicó aquí mismo, en Inlucro, el 5 de octubre de 2016. “Carece de cualquier sentido que el nuevo Ejecutivo de Mariano Rajoy se someta a los caprichos políticos de Cs, al sabotaje de su acción de gobierno y al linchamiento personal constante desde los medios controlados por Podemos y los secesionistas catalanes. Sería un grave error histórico para el PP tener que hacer frente a una Insurrección en Barcelona con solo 137 diputados y con la retaguardia al descubierto”.Por otra casualidad imposible, y como anécdota, tal día como hoy hace un año, la crónica de la crisis del Euro que hemos publicado entraba en imprenta. Pedía una conclusión, y este fue su último párrafo: En política, la derrota es huérfana, de modo que es inútil analizar causas primarias y errores. El éxito acaba con las críticas, y el fracaso, con los perdedores. La división interna en el PP ha provocado una abstención significativa, determinante a la postre. A falta de conocer los estudios sociológicos, se puede estimar entre 500.000 y 1 millón de votos. Finaliza un ciclo de 30 años, marcado por la hostilidad de la Prensa.Comparar es conocer. Se está haciendo de esperar el estudio comparativo del tratamiento que reciben en los medios de comunicación un partido radical y violento como Podemos y un movimiento como VOX, claramente democrático y constitucional. El objetivo de un análisis estructural de ese tipo no debe ser moral, sino funcional. Periodistas venales y sectarios que no elige nadie acaban determinando el rumbo político y económico de una sociedad.A toro pasado, el mayor error estratégico que cometió Mariano Rajoy fue consentir que el Lobby catalán siguiera teniendo el control de la Prensa en España. Y el mayor fallo de Pablo Casado, en las recientes elecciones, ha sido no entender la perversa mecánica de los dos debates en televisión. Albert Rivera consigue crecer en votos a pesar de una mala campaña electoral, gracias a que el veto a VOX le convierte en el centro de los debates. El PP jamás debió aceptar ese formato tramposo. El patinazo del equipo de comunicación de Pablo Casado ha sido absoluto.Lo que mejor define el Régimen Catalanista que padecemos en España es que el Psoe de Pedro Sánchez haya anunciado que piensa gobernar el sólo con sus 123 escaños y que al PP de Rajoy no le dejarán gobernar con 186 escaños, ni en una situación de gran emergencia económica. En lugar de los 100 días de gracia, en dos semanas, le sabotearon las Andaluzas, le montaron una Huelga General a los 59 días y a los 71 días, le anunciaron en Prime Time, en La Sexta, un Choque de Trenes.(c) Belge(Visited 533 times, 1 visits today)
Después de oir a un escuchante de Cadena Ser creo que el asunto es que nos da lo mismo la gestión realizada o no realizada, las corruptelas, los programas… creí que se votaba a un partido o a otro dependiendo de la simpatía que nos despertaba ese partido o de lo guapo que fuese el candidato (todavía no se puede decir candidata), pero no, ese escuchante que en una llamada telefónica decía que lo importante es que la izquierda sumaba para que no gobernase la derecha, me ha abierto los ojos. En este país somos de izquierdas o de derechas igual que somos de un equipo de fútbol o de otro (también existimos los que no somos de nadie, pero los menos).
Pero al igual que los equipos de fútbol, llenos de mercenarios a sueldo, llevan los nombres de una ciudad sólo por tradición, las siglas de los partidos se asocian a derechas o izquierdas sólo por tradición, porque si es por propuestas, programas, ideología… bueno, esto qué más da…
Saludos.
Así es.
Amigo alrodrigo, no se que edad ronda usted… yo, que rondo los cincuenta, eso que dice lo tengo, no claro, clarísimo…. en Expaña la gran mayoría es hooligan, sin ningún recato, porque yo lo valgo… no hay una neurona dentro de millones, trillones y sillones de cerebros ibéricos…
Así nos va…
En 2008, Mari-ano, nos echó del PP en el congreso a la búlgara de Valencia…
Hasta ese año, salvo a Ruíz Mateos, siempre voté a PP.
Desde entonces, no voté hasta que llegó VOX con Vidal Cuadras en las europeas.
No hay otra opción, VOX es el PP que nos representó hace muchos años, mejorado, sin los complejos de JoséMari y su bigote…
Saludos
Saludos
No suelo hablar de siglas, pero haciendo una excepción, es que es de chiste, sobre todo la prensa. Creo que somos muy pocos los que echamos el vistazo a los programas, no a la propaganda, a los programas.
Decir que Vox (que también tendrá sus desperfectos) es de extrema derecha es llamarnos directamente, por decir algo fino, imbéciles. No darse cuenta que el programa de Podemos es un plagio de los escritos de Onésimo Redondo salvo en el tema de unidad nacional y misa diaria es de estúpidos. Que casi todos los partidos de izquierdas sean abortistas y defensores de la eutanasia ya no tiene nombre… y así podríamos seguir…
Saludos.
Los partidos no se creen sus programas: aspiran a controlar la Administración y sus 500.000 millones de Gasto Público. Es una administrocracia. Le dicen al administrado que elija, pero es un proceso carente de lógica, porque la Administración tiene vida propia.