Roma se rebela. Los griegos votaron que no querían el EURO. Los letones, tampoco. Los británicos insistieron: no. Los italianos acaban de votar en contra del EURO. En Francia, España y Portugal, ya se dibujan claras mayorías hostiles a la Unión Monetaria. Unos y otros suman una población que supera los 270 millones de habitantes. Son casi tantos ciudadanos que han experimentado en su economía doméstica lo que es realmente la Unión Monetaria. En 15 años han transitado del entusiasmo a la decepción.
A favor del EURO, figuran Alemania, Austria, Suiza, Dinamarca, Noruega, Holanda, Suecia y EEUU. No es necesario subrayar el punto cómico que encierra esta escena de tahúres codiciosos cuando proclaman su adhesión a los grandes principios democráticos y liberales y su aversión al temible riesgo moral.Cualquier análisis político y económico debe centrarse en identificar los hechos significativos que se puedan relacionar entre sí de un modo coherente. Si intentamos analizar el déficit democrático de la Unión Europea, es fundamental acotar el periodo de tiempo y determinar qué hechos son relevantes.La fecha más decisiva en la Historia reciente de las instituciones europeas es la de la Carta secreta que la Canciller alemana Ángela Merkel hizo llegar, a través del BCE de Trichet, a los dirigentes de Portugal, España, Italia y Grecia en agosto de 2011. El chantaje de la infame misiva es relativamente público porque Silvio Berlusconi dio a conocer su contenido. Los hechos significativos son, de un modo evidente, todos los procesos electorales que se han sucedido desde entonces y que se han podido ver alterados o interferidos de un modo irregular.El resultado es un verdadero bofetón dialéctico. En Grecia, primero, Chipre después, Italia, Portugal, Francia, Reino Unido y ahora España, casi todas las elecciones han sido irregulares o anómalas. En Grecia, fueron eliminados Papandreu y Samaras, y el Referendo convocado por Tsipras y Varoufakis para vestir el Santo acabó siendo un esperpento histórico. En Chipre, montaron un corralito y fue barrido el gobierno legítimo. En Francia, son sórdidas maniobras las que acaban con Dominique Strauss Khan y Fillón, y colocan a Macron en la Presidencia. En Italia, se habían sucedido 5 tecnócratas no elegidos al frente del gobierno y ahora el Presidente de la República, Sergio Mattarella, acaba de impedir la legítima formación de un gobierno contrario al EURO. En el Reino Unido, llevan 4 años achicando agua e intentando escapar de la Unión Europea. En Portugal, José Sócrates se ve forzado a dimitir, y en la siguientes elecciones de 2015, una moción de censura tumba al ganador recién elegido, Passos Coelho. En España, huelga recordar el cúmulo de circunstancias extrañas que han contaminado todas las elecciones desde 2011.Son ya 8 años seguidos en los que 270 millones de ciudadanos europeos han visto afectado su voto y gravemente comprometida su capacidad para elegir democráticamente su gobierno. Han ido entrando y saliendo de escena, tecnócratas y personajes de trayectoria dudosa, mientras una Prensa corrupta y venal se dedica a criminalizar a la ciudadanía por mostrar su abierto rechazo a la deriva de las instituciones europeas. En ese mismo periodo, Alemania ha intervenido el BCE en provecho de sus propias empresas y bancos y ha desarmado los aranceles aduaneros en los países del Sur hasta destruir 11 millones de puestos de trabajo para favorecer sus propios intereses en China.(Visited 247 times, 1 visits today)
Hola Belge.Que debería haber un debate sobre la permanencia de España en la union monetaria?Claro que si.Que si lo hay?,como ne sea en el bar de tu pueblo….Me levanto todos los días a las 6 de las mañana y hojeo bastante prensa digital y el único debate que hay eb ESPAÑA e3s si fue penalti del Madrid.Unpoco y muy escondido y silenciado sobre si debemos conservar el régimen del 78 o hacer una reforma constitucional.La democracia en España es lo que es.EL partido del gobierno calificado por la justicia como banda delictiva y ahí tienes al mejillón gallego atornillado al sillón.De vergüenza ajena.
Bromas aparte, chisclas, el debate sobre el euro fue hurtado a la ciudadanía española. Debió celebrarse en 92 o 93, y en lugar de eso, si tiras de hemeroteca, aquí se pasaron los días hablando de los nacionalistas vascos. Maniobra de distracción. Nadie habló de la Unión Monetaria. Los nacionalistas tenían ansia….se creían esos bobos que en Europa ataban los perros con longaniza.
Pue seso Belge,es lo que digo
Ya,pero en cambio si preguntas qué opinan del €,la mayoría piensan que fue un jodido timo.
De ahí a lo otro,no hay mas que un pequeño paso,como se puede comprobar en cada vez mas paises.
Saludos.