Tierra mítica, donde las hay, la tierra de los toros. Dan fe de ello, tanto la mitología clásica de los pueblos mediterráneo como la propia etimología. En sus confines, Europa lindaba con el inhóspito territorio de bárbaros, pingüinos y esclavos. Desde entonces, ha pasado el tiempo y nada ha cambiado, salvo que el imponente e insumiso Toro es especie en vía de extinción.El Fondo de Rescate de los PIGS, aprobado con nocturnidad y alevosía, viene condicionado por el recorte del Presupuesto de la PAC. A cambio de renunciar a vetar el préstamo de 750.000 millones de euros, los países del Norte reducen su contribución a los Presupuestos de la UE e imponen sus políticas económicas y medioambientales. Se incrementa un 30% el dinero destinado a Cambio Climático y Transición Ecológica. Europa vuelve a ser lo que nunca ha sido: tierra de pingüinos y esclavos.La prueba del algodón de la Farsa que han escenificado es que dos de los países que salen más beneficiado por el reparto de fondos son Grecia y Portugal. Van a recibir el 30% de las ayudas a fondo perdido. ¿Qué sentido tiene que reciban 115.000 millones de euros si casi no han sido afectados por la epidemia de SARS COV 2? De los 750.000 millones pactados por los 27 países miembros, 500.000 millones son para evitar que los PIGS puedan sentir la tentación de suspender el pago de la Deuda por causa de fuerza mayor. Alemania y sus socios protestantes les obligaron en 2010 a depender de las exportaciones y ahora no se vende un pimiento fuera. Fue gritar “Deal” el Ministro Michel, y bajó la Prima de Riesgo de los PIGS a mínimos históricos. No es para menos. Son las Cosas Veredes de la UE, que recuerdan la noche de insomnio en la que Varoufakis vio la luz y salvó con su dimisión a los Fondos de Inversión noruegos y alemanes. Sabiendo que Italia y España seguirán pagando religiosamente los intereses de la Deuda, los inversores están tranquilos: sus manirrotos gobiernos pueden ir al mercado a para seguir financiando sus corruptelas y disparates ideológicos. Las condiciones del Plan de Rescate son inmejorables: 7 años de carencia y 30 años para devolver el principal. En el caso de España, son algo más de 2.000 millones de euros al año, a los que hay que sumar los 1.000 millones de la factura de la PAC. Un chollo financiero y una gran coartada política para que el PSOE y Podemos puedan reconducir todas sus promesas sin ponerse colorados. Seguirán trabajando para Alemania y defendiendo los intereses de sus socios protestantes con la conciencia limpia, sin tener que disimular. Con un poco de suerte, hasta la Oposición les facilita el trabajo.© Belge