Archivos de la categoría La Revolución Puritana

Vuelve la Leyenda Negra


Cuando la historia ha acabado, la historia continúa. Toca añadir un capítulo nuevo, como en esos culebrones colombianos de los noventa. Da pereza porque es más de lo mismo, sin más argumento que el relevo de los actores involucrados. Desaparecido del primer plano de la actualidad el divertido Donald Trump, aparece en escena el infame Biden con toda una recua de personajes lamentables. Es un bodrio.La democracia de la representación no alcanza ni a sucedáneo de la democracia representativa.

Los puritanos, envalentonados tras el éxito de la pandemia, aprovecharon el Columbus Day para darle una vuelta de tuerca a la Leyenda Negra y reprochar a España su pasado colonizador. Afear a los españoles su gloriosa historia para mantener la herida abierta es casi un hobby para ellos. Es una manera muy ventajista de venderse como libertadores predestinados y condicionar la política exterior de sus competidores. 530 años después, América sigue siendo el Nuevo Mundo, esa tierra de Libertad inmune al pecado original. Piden perdón por las atrocidades de los españoles, los mismos descendientes de la Raza Pura que aprobaron en el XIX la Indian Removal Act, que fundaron el Ku Kux Klan y que siguen justificando a diario el apartheid.

No menos esperpéntico es oír al Papa lamentar los pecados españoles de la evangelización americana. ¿Quién mejor que la Iglesia Católica para conocer los hechos y los datos de una corriente migratoria que se prolongó durante 3 siglos? El número de españoles que se dispersaron por el vasto continente americano oscila entre 100.000 y 250.000 almas, según fuentes históricas tradicionalmente hostiles al Reino de España. Según las licencias de embarque, no fueron más de 100.000 entre 1493 y 1824. A lo largo del siglo XVIII, la cifra ya es completamente insignificante. Nueva España, Perú, Río de la Plata y Nueva Granada, los 4 Reinos castellanos de Indias abarcaban una extensión de 20 millones de km2 y una población de 60 millones de habitantes. Un español viviendo cada 1000 km2. En comparación, han llegado y se concentran actualmente en España 2 ciudadanos marroquíes por km2. En buena lógica, no se puede considerar que hubo “colonización” ni tampoco “guerras de independencia”. En cuanto a matanzas y atrocidades, ni que fueran aquellos emigrantes Jack el Destripador. Los delitos y crímenes registrados en España en los últimos 20 años son más que todos los que cometieron nuestros antepasados durante 200 años.

Aunque se pueda considerar que el 11-M fue una réplica del 11-S, la Revolución Puritana como tal empezó años antes. Fechas importantes hay muchas. Son como los jalones de la Historia. Fechas significativas, no tantas. La ruptura de la tregua entre Protestantes y Católicos, tras 40 años de paz en el Viejo Mundo, no la vieron venir ni los que la protagonizaron. La caída del Muro de Berlín no es tan significativa como el Golpe de Moscú, que desmembró la URSS el 19 de agosto de 1991. 5 meses después, quedaba ratificado en Maastricht un Tratado de la UE en el que los países católicos ya no hacen ni sombra.

© Belge
Periodista, autor de una trilogía sobre la revolución puritana en la España del Euro
La Estafa del Euro Explicada a un Niño de 6 años (2018)
Inmunidad de Rebaño (2020)
La Sociedad Rota (2021)Sociedad

El gran reset: hacia una sociedad de castas


Cuentan por los mentideros de las RRSS que Klaus Schwab, el fundador del Forum de Davos, desciende de la Casa Rothschilds. A sus 82 años, ha firmado y publicado en francés “Covid 19: la grande reinicialisation”. Es un libro extraño, de ciencia ficción. Está ambientado en un universo paralelo al nuestro pero tan similar que parece una copia de mercadillo. Decían los antropólogos clásicos que, sometidos a los vaivenes de la Historia, los hombres cambian de patria, de lengua y de credo, pero nunca de cultura gastronómica. Schwab y Malleret plantean un presente alternativo en el que una pandemia obliga al ser humano a cambiar su industria, su comercio con los demás, todas sus instituciones y creencias religiosas, y también sus hábitos alimenticios. La enfermedad no es muy letal y se desconoce el modo en que se contagia, pero el miedo induce una batería de respuestas políticas irracionales que se presentan como lógicas. Al final, se descubre que la pandemia nunca existió, por supuesto, pero es demasiado tarde. La verdad es ya el privilegio de los Brahmanes en la nueva Sociedad de Castas y todos los disidentes han sido confinados, por su bien, en Campos Sanatorios.

La apología que Klaus Schwab y Thierry Malleret hacen del totalitarismo para salvar las habichuelas del Imperio es indisimulada. A cargo del Trilema de Rodrick se despachan contra el exceso de democracia, de soberanía y de mundialización (mal traducido como globalización). ¿De qué sirve ser rico, poderoso y anglosajón si debes compartir tu destino de vacaciones con un tropa de pobres que ha tomado un vuelo Low Cost? Madre Naturaleza se está quejando y por eso Klaus y Thierry son ecologistas, inclusivos e igualitarios.. En su universo post-pandémico, globalización, soberanía y democracia, en su justa medida. El mundo es un coto reservado para unos pocos (3%) anglosajones y asimilados. Los Neopuritanos del siglo XXI son los guardianes del Planeta.

En el fondo, el trágico devenir de España que me he esforzado en documentar en tres libros es también el inexorable destino de toda la civilización católica en el mundo. El ataque de los puritanos en los últimos 20 años está siendo tan directo y despiadado que cuesta vislumbrar un tablero estratégico en el que los católicos salgan bien parados. En un mundo que ha perdido sus raíces rurales, la farsa ecologista y marxista prenden como la yesca entre los urbanitas alelaos. Tan pocos son ya inmunes a esas chorradas retóricas, que bien podría apostarse que Malleret y Klaus han redactado su Vulgata programática del tirón, micrófono en mano, recopilando nuevos tópicos y lugares comunes.

© Belge
Periodista, autor de una trilogia sobre la España del Euro
La Estafa del Euro Explicada a un Niño de 6 años (2018)
Inmunidad de Rebaño (2020)
La Sociedad Rota (2021)

Addenda para una trilogía


Me gustan los libros. Me pasé mi infancia en Bruselas leyendo. Era el terremoto de los cumpleaños, el terror de las excursiones escolares, pero por algún motivo me podía quedar varias horas seguidas sentado en una silla, atrapado en las páginas de una novela de aventuras. Terminaba una y empezaba la siguiente. Gracias a Vincent, el generoso patrocinador que ha hecho posible la Trilogía sobre el Euro, he redescubierto el placer de pasear con un libro de la mano, de garrapatear los márgenes. No hay mejor regalo.

“El día de después” de Phillipe De Villier y “Covid-19: el gran reseteo” de Klaus Schwab y Thierry Malleret son obras muy diferentes en su enfoque y estilo. Muy francés y literario uno, aséptico y directo el otro.De villier señala con el dedo los nubarrones de tormenta que empañan y cierran el horizonte, Schwab y Malleret concatenan premisas y enumeran promesas. Aportan pocos datos, de modo que sorprende que se hayan lanzado a publicar sus reflexiones. Parecería que uno haya trabajado sus discursos políticos y los otros,aprovechado el confinamiento para preparar una gira de conferencias.

Me centraré en “Covid-19: la grande réinicialisation” porque el libro justifica una serie de escenarios lógicos y blanquea unos futuribles en base a unas premisas tempranas que no pueden darse por verificadas. Si no se conocen las causas, los vectores de contagio, la velocidad de transmisión y la tasa de letalidad, ¿cómo puede decidirse a priori qué modos de producción y servicios son esenciales o prescindibles? Si no ha quedado demostrado – ni mucho menos – que la epidemia se haya extendido por los aeropuertos, ¿qué sentido tiene condenar o condicionar el tráfico aeroportuario? El verdadero problema es que parecía lógico.Todo relato mediático lo acaba pareciendo.

Parafraseando a Mario Draghi, Schwab y Malleret argumentan que los países occidentales tendrán que hacer lo que haga falta, imprimiendo moneda sin límite y gastar sin control para compensar todas las rentas que se van a perder por el camino. Tabula Rasa. ¿Y la infación? Bah, parafraseando esta vez a Fernando Simón, el simpático portavoz del gobierno español, 1 o 2 puntos, como mucho. Cuando las premisas no bastan para apuntalar la retórica de la “nueva normalidad” se recurre a supuestos estudios de misteriosos expertos. Es el Deus ex Machina del pobre en los telediarios.

De la Tabula Rasa que perpetraron en 2008 hasta la actual pandemia, sólo ha transcurrido una década, tal y como acertaron a vaticinar algunos analistas. Un suspiro histórico.El monetarismo puritano toca a su fin. Amenaza con cambiar las reglas del juego para instaurar un régimen transnacional de control totalitario. Pero si el achique de espacios era financiero y presupuestario entonces, las principales medidas que los lobbies puritanos andan coordinando por encima de la capacidad soberana de las organizaciones políticas son de naturaleza social y cultural. Ya no nos piden que nos esforcemos por gastar menos y pagar más impuestos, nos quieren aislados, aburridos e indefensos.

Entre la panoplia de medidas que imponen a los gobiernos bananeros de su imperio para corregir sus hábitos de vida, algunas son más llamativas que otras. ¿A qué clase de estudio previo, científico por supuesto, puede corresponder la extraña uniformidad de las disposiciones “razonables”? Puede entenderse que los díscolos latinos que hacen vida fuera de casa vean impedido su acceso a bares, restaurantes y otros lugares de ocio, pero ¿qué sentido tiene aplicar esos ucases en Noruega, Suiza o Alemania? Parece lógico cerrar las librerías en Francia, para que los descendientes de Astérix y Obélix no monten peligrosas tertulias, pero a qué orate se le ha ocurrido damnificar en España al gremio de libreros? Es más probable que los españoles se contagien de Coronavirus en las saunas del suegro del Presidente del Gobierno que disputándose un libro en una estantería.

No se conoce el mal que aqueja a las sociedades católicas de Europa y América, ni la forma en que se transmite, pero los puritanos han impuesto, a priori, la distancia social, la mascarilla y la vacunación universal como lógica profiláctica . Les da igual si, a posteriori, ha quedado demostrado que esas medidas son ineficaces.

(seguirá)
Sociedad

¿Por qué manipulan el exceso de mortalidad?


El exceso de mortalidad es un concepto que se presta a confusión. No es intuitivo y, por lo tanto, resulta fácil de manipular. Por alguna razón, no le prestaron demasiada atención en los primeros meses. Se diría que los gobiernos se despistaron, más preocupados por vender cifras de contagios. Fue a partir de enero cuando entendieron que el exceso de mortalidad mostraba con toda crudeza que las “vacunas” ni curan ni previenen. Es pronto para que pueda hablarse de “efecto placebo”, teniendo en cuenta que en los dos primeros meses de vacunación masiva de las poblaciones, se ha dado una correlación bastante nítida con el incremento de la mortalidad.

El persistente incremento de la mortalidad en el mundo católico es anterior a la pandemia de coronavirus y ha continuado invariable después de iniciarse la campaña de vacunación. Es difícil identificar una causa de mortalidad, aunque son varias las correlaciones significativas. Pero lo que es evidente es que un virus emergente aparecido en 2020 no puede causar muertes 5 años antes.

La campaña de vacunación universal está siendo un fiasco absoluto porque no evita los contagios y no reduce la tasa de letalidad. Según los datos oficiales del Instituto John Hopkins, a más de 1.000 millones de personas mayores de 65 años ya les han inoculado los sueros experimentales de Pfizer, Moderna y Astrazeneca. Y dado que es el principal colectivo de riesgo, susceptible de morir como consecuencia de un posible contagio, el exceso de mortalidad debería haberse reducido casi en la misma proporción. Pero es algo que no ha ocurrido.

La tentación de manipular las estadísticas era grande, como se ha visto con total claridad en Israel y en el Reino Unido. El gobierno de Boris Jonhson, que infló las estadísticas de mortalidad por COVID antes de iniciarse la campaña de vacunación, vuelve a contabilizar las muertes como se ha hecho siempre. De modo que sólo 1 o 2 de cada 100 fallecimientos será por neumonía atípica compatible con un diagnóstico de coronavirus. De abril a septiembre, es una cifra que se sitúa por debajo de las 15 bajas diarias. En un país menos poblado, como Israel, la estadística oficial que se registre en hospitales se reducirá de ese modo a 1 o 2 fallecidos por día.

La paradoja a la que se enfrenta los distintos gobiernos que integran el Frente Puritano es que deben “vender” que las vacunas son útiles al mismo tiempo que siguen metiendo miedo a la población y cerrando fronteras. Los Puritanos nunca fueron demasiado listos, pero eso no les ha impedido colonizar el mundo entero. Cabalgar contradicciones es su especialidad: lo llaman dialéctica. Pero resulta que la “dialéctica” de la vacunación universal es la misma que la del “Efecto Placebo”. Habrían conseguido los mismos resultados políticos, económicos, religiosos y sanitarios inoculando suero fisiológico a toda la población.

A medida que se incremente el porcentaje de población vacunada, serán cada vez más los países que imiten la estrategia del Reino Unido y de Israel. Deben manipular sus estadísticas para hacer desaparecer el “exceso de mortalidad” y poder justificar la imposición de medidas de excepción y la supresión de derechos fundamentales.
letalidad
En el gráfico se puede apreciar como la letalidad del supuesto contagio permanece estable en todo el mundo, ligeramente por debajo del 2%, desde mucho antes de anunciar la existencia de las vacunas y empezar a administrarlas. Son estadísticas compatibles con un diagnóstico de neumonía atípica, que abonarían la tesis del “efecto placebo”

(c) Belge