Tabla 1: evolución de la tasa de mortalidad por franja de edad
Edad
1981
1990
2000
2010
2015
2021
2022
00-14
0,3139
0,3209
0,2345
0,1904
0,2598
0,2766
0,2927
15-44
0,9719
1,2061
0,9299
0,5823
0,4741
0,4763
0,4834
45-64
6,6111
6,1868
5,0150
4,1565
3,9613
3,8282
3,8046
65-74
25,531
21,333
17,894
13,783
13,244
13,858
13,837
75-84
71,385
59,875
59,177
40,435
41,821
38,194
37,823
+85
188,95
177,96
163,34
136,88
141,46
135,06
141,95
Total
7,7688
8,5727
8,8866
8,2050
9,1532
9,5942
9,7964
Tabla 2: evolución de la mortalidad por franja de edad
Edad
1981
1990
2000
2010
2015
2021
2022
00-14
3011
2432
1407
1320
1824
1848
1956
15-44
15203
21032
17534
11697
8927
8238
8362
45-64
55322
52588
44634
47691
49889
53596
53270
65-74
68218
67221
68162
51085
56910
64856
64710
75-84
96867
107596
128083
120093
124169
114583
113186
+85
51962
79370
108458
138045
185040
211502
222139
Total
290583
330239
368278
369931
426759
454622
463720
Fuente: Estadísticas actualizadas del Censo de población del INE y del Instituto de la Salud Carlos III
La Esperanza media de Vida creció en España y en otros países católicos hasta el año 2010. A partir de ese momento, se produce una inflexión notable, más o menos acusada según las regiones y la franja de edad. Se tiende a explicar que el marcado envejecimiento de la población incide negativamente en la tendencia, pero es solo parte de la verdad estadística. Y de hecho, lo que se observaba hasta hace poco en los países católicos es que la población de ancianos crecía más deprisa que su correspondiente tasa de mortalidad. Más jubilados y con mayor esperanza de vida saludable.¿Qué pasó en 2010 para que cambiara la tendencia de forma tan abrupta? Hemos escrito un libro (La Sociedad Rota) para intentar documentar y explicar de forma amena lo que los Fondos de Inversión y las Aseguradoras anglosajonas llaman “riesgo de longevidad excesiva”, pero en esta ocasión el enfoque es dejar que las cifras hablen por sí solas.
Manipulaciones estadísticas al margen, ordenadas por el gobierno para ajustar la realidad a su relato ideológico y su ejercicio del poder, se aprecia la clara involución de la última década. Ni siquiera la fuerte inmigración de personas relativamente jóvenes y sanas altera esa tendencia a medio plazo. Excepto entre los 15 y 45 años, la mortalidad ha repuntado con fuerza desde 2009-2010.En lo que va de año, han fallecido en España 263.000 personas. Son 26.000 más que en el mismo periodo de 2021. En algunas CCAA como Madrid, Castilla y León o Castilla La Mancha, el exceso de mortalidad en el mes de julio roza ya el 100%. No existen precedentes de registros estadísticos tan malos. Se está reduciendo la Esperanza de Vida a ojos vista, a pesar del progresivo envejecimiento de la población jubilada. Desde el punto de vista actuarial, las “pandemias” de Gripe Aviar y Coronavirus han resultado providenciales para contener el Riesgo de Longevidad Excesiva. De haber seguido elevándose la edad de supervivencia al ritmo de los años 90 y de la primera década del siglo XXI, es probable que muchas Aseguradoras y Fondos de Pensión se hubieran visto abocados a suspender pagos tras la Crisis Subprime.La segunda derivada de la crisis sanitaria es aún más perversa, por previsible que fuera su lógica. La mejor manera de “reducir” dicho riesgo, de un modo significativo, es “dinamitar” el Estado del Bienestar que los salvó en 2008 y asumir sus funciones. A menor calidad de vida y mayor pobreza, menor Esperanza de Vida Saludable. Más que una triste paradoja, es la genuina ilustración del viejo dicho castellano: Cría cuervos y te sacarán los ojos.
La reciente sentencia del Tribunal Supremo en EEUU sobre el derecho al aborto ha reavivado el rescoldo de un debate artificial. Uno de los tantos que gustan a los marxistas para asentar sus dogmas. “No hay negocio más lucrativo que luchar por derechos que ya se tienen, en nombre de opresiones que ya no existen”. Lo que decía Thomas Sowell, el economista americano, es extensivo a todos los victimismos que disfrazan de derechos universales las obligaciones y servidumbres que las minorías imponen a las mayorías: Érase una vez un lobito bueno al que maltrataban todos los corderos, érase también un príncipe malo, una bruja hermosa y un pirata honrado.El fallo de la Corte Suprema corrige una sentencia de 1973, que reconocía el derecho constitucional de los negros y de los pobres a no tener una descendencia innecesaria. Es tardío. En China, el Comité Central del Partido Comunista puso fin en 2015 a la Política del Hijo Único. El Derecho Universal de las mujeres a no alumbrar niñas, que se prolongó durante casi 40 años, no impidió que China duplicará su población.En la lógica feudal que emana de la Revolución Luterana, es tan extraño reconocer derechos a las siervas sometidas como preguntar a una vaca nodriza si quiere parir. El Señor del Castillo ejerce el derecho de pernada sobre los cuerpos e impone el Credo Oficial, del mismo modo que el ganadero cuida de sus reses y administra su explotación. Los puritanos nunca ocultaron que su preocupación por la mejora de la raza nacía de esa lógica ganadera. Producían soldados y esclavos en exceso, era su deber seleccionar los mejores especímenes.El victimismo y los empleados de correos llevaron a Joe Biden a la Casa Blanca, pero las cosas están cambiando en EEUU. En un futuro no muy lejano, los hijos de los chicanos del Sur y demás emigrantes serán mayoría sociológica. La población anglosajona y escandinava está envejeciendo y pesa menos del 3% en todo el planeta. El aborto de los pobres empieza a ser un lujo.La alternativa solvente a la lógica capitalista de los puritanos siempre ha existido. De hecho, un siglo después, las tesis de Emile Durkheim siguen en pie, tan válidas como el primer día, mientras que los escritos y reflexiones de Max Weber suenan panfletarios y deliciosamente trasnochados. Hoy nadie se atrevería a sostener que exista una “ética” protestante que pueda justificar todos las hecatombes y genocidios perpetrados por los puritanos en su delirio imperialista.Propongo la creación de un Índice Durkheim, como homenaje al excelso científico francés. Toda sociedad humana puede definirse y perfilarse, de un modo sencillo, por la conjunción de sus tasas de mortalidad: homicidios, suicidios y abortos. Es así porque, a diferencia de guerras, pandemias y exterminios varios, dichas ratios son consecuencia directa de decisiones individuales que comprometen la libertad.Comparación de las sociedades por tipo de religión
Protestantes
Población
Homicidios
Suicidios
Índice Durkheim
EEUU
330 MM
20.000
45.000
200/MM
Escandinavia
30 MM
300
4.000
140/MM
Reino Unido, Irlanda
70 MM
1.000
6.000
100/MM
Alemania, Holanda
100 MM
1.000
13.000
140/MM
Sudáfrica
60 MM
23.000
1.000
400/MM
Australia, Nueva Zelanda
30 MM
400
3.500
130/MM
Total
620 MM
45.700
72.500
190/MM
Católicos
Población
Homicidios
Suicidios
Índice Durkheim
España
47 MM
350
3.500
80/MM
Italia
65 MM
400
4.000
65/MM
Francia
65 MM
800
8.500
140/MM
Portugal
13 MM
100
1.000
85/MM
Polonia
40 MM
250
4.000
80/MM
Total
230 MM
1.900
21.000
100/MM
Islámicos
Población
Homicidios
Suicidios
Índice Durkheim
Marruecos
37 MM
600
2000
70/MM
Argelia
44 MM
500
1500
45/MM
Túnez
11 MM
300
600
80/MM
Egipto
100 MM
2200
2400
45/MM
Arabia
35 MM
400
1500
55/MM
Turquía
85 MM
2500
2000
55/MM
Total
227 MM
6500
10000
70/MM
Budistas
Población
Homicidios
Suicidios
Índice Durkheim
China
1400 MM
9500
135.000
105/MM
Japón
125 MM
400
20.000
165/MM
Camboya
20 MM
400
1.800
110/MM
Tailandia
70 MM
2500
10.500
185/MM
Vietnam
100 MM
1200
6,500
75/MM
Birmania
55 MM
1000
2.200
60/MM
Total
1770 MM
15.000
176.000
105/MM
El Índice Durkheim pone en evidencia la influencia del marxismo en diferentes tipos de sociedades tradicionales . Para completar el análisis, solo queda por mostrar la evolución de las políticas de DESNATALIDAD en función de la religión a lo largo de los últimos 50 años.
Religión
Población
Índice Durkheim
Índice Fecundidad
Variación
Protestantes
620 MM
190/MM
1
0%
Católicos
230 MM
100/MM
1
-50%
Islamistas
230 MM
55/MM
3
-50%
Budistas
1770 MM
105/MM
1,5
-65%
Periodo 1972 – 2022
Amenazados, con un Índice de fecundidad mínimo, los puritanos se las ingeniaron para imponer agresivas políticas de desnatalidad en el resto del mundo, con más o menos éxito, en función del grado de penetración de la ideología marxista. El resultado es impactante. Y la correlación, indiscutible e inapelable: los países con mayor natalidad natural son los que menos homicidios y suicidios registran. Tal y como predijo Durkheim.En sentido inverso, los países puritanos o contagiados de marxismo luterano, han tenido que suplir los efectos provocados por la caída de la natalidad favoreciendo una inmigración desregulada. La mayor anomía se traduce en un fuerte incremento de homicidios, abortos y suicidios.