Andan todos proclamando a los cuatro vientos que Rajoy tiene la obligación de presentarse a la sesión de investidura. Quieren humillar en público a quien ha impedido la hoja de ruta que tenían prevista. A la vista de toda España, con las cámaras de televisión de testigos y en horario de máxima audiencia. Leña al mono, que es de goma.Que si la Constitución (ese papel con el que se limpian el culo tan a menudo) dice esto o lo otro; que si el mismo Rajoy dijo algo hace unos meses; que si lo del Rey no es un encargo, sino un mandato; que si el que tiene la responsabilidad de conseguir un gobierno es Rajoy, etc… Razonamientos sofistas y falsarios, todos.No tienen ninguno de ellos ni un solo gramo de vergüenza. Ni por supuesto les importa un carajo lo que vaya a ser de España y de los españoles. Pero la prensa contadora de pokémons que tenemos en este país mayoritariamente transmite el mismo mensaje, todos los días y a todas las horas.Rajoy dijo ayer alto y claro, para quien quisiera escuchar, que sólo el PP defendió la necesidad de dejar aprobados los presupuestos del año 2016. Pero de eso la prensa cobarde y vendida no dirá nada. La situación podría haber sido en España un auténtico esperpento, sin aprobar los presupuestos de 2016, repito, 2016, hasta conformar un gobierno tras unas hipotéticas terceras elecciones, es decir, allá por octubre en el mejor de los casos. Eso, si dichas elecciones cambian la situación y no hay otro bloqueo, porque entonces seríamos el hazmerreír del mundo.Yo creo que a los ciudadanos les van quedando ya pocas dudas de la catadura moral de los mandatarios de PSOE, Podemos y C’s.Rajoy, que ha prestado un servicio al país que se tardará muchos años en reconocer, está en su derecho de exigir dos cosas:La primera, no verse sometido a escarnio público. De manera que, o bien le aseguran la investidura o no se presentará.La segunda, no sufrir una moción de censura a las primeras de cambio. Por lo tanto si no consigue acuerdos programáticos (utilizó ayer esa expresión en media docena de ocasiones en su rueda de prensa) tampoco se presentará.Probablemente aceptaría a cambio de esos acuerdos que la legislatura fuera corta, con el compromiso de adelantar elecciones en un par de años, en una decisión consensuada con quien le dé su apoyo para la investidura. Y ese apoyo va a exigir que sea público y notorio, es decir, va a exigir que alguno de los chiripitifláuticos líderes de la oposición se desdiga.Si no se dan estas condiciones en un plazo razonable, como dijo ayer, es decir, en el tiempo estrictamente necesario y suficiente para que el resto se retrate, Rajoy comunicará al Rey que no dispone de apoyos y no se presenta a la sesión de investidura.Y por supuesto, el Rey, que es bastante menos campechano que su emérito padre, no va a aceptar una nueva tomadura de pelo por parte de quien ya le tomó el pelo hace un mes. Por tanto no encargará a ningún otro candidato que haga gestiones para intentar formar gobierno. En ese caso tendremos automáticamente terceras elecciones.Los ciudadanos han tomado buena nota, para esas terceras elecciones. Vaya que si lo han hecho.Saludos